Negocio redondo el que ha hecho la empresa que comercializa el 'caganer' de Puigdemont. Ni Junqueras, ni Rajoy, ni el Papa, ni Trump, ni Rufián, ni Pujol, ni Artur Mas, ni los Jordis... Ninguno puede batir en ventas a las figuras decorativas del expresident de la Generalitat. No hay existencias en ningún mercadillo navideño de Cataluña: "Agotado", "no tenemos" o "no sabemos cuándo vamos a reponer más" son las respuestas más habituales que reciben los interesados en adquirir el 'caganer' que unos quieren por lo que representa Puigdemont en el desafío independentista catalán y otros porque a última hora se echó para atrás y no proclamó la independencia desde el balcón de la Plaza de Sant Jaume.
La empresa que vende los 'caganers' de famosos trabaja estos días a destajo para fabricar nuevas figuras de Puigdemont. Es un proceso que conlleva una complicada elaboración artesanal: disponer del molde, rellenarlo de barro, eliminar la rebaba... después se tiene que pulir y pintar con pincel. Todo ello a mano, nada de elaboración industrial, por lo que la creación se prolonga durante varias horas. En este vídeo se puede comprobar cómo se elabora un Messi o un Cristiano Ronaldo:
Estos 'caganers', que se comercializan al precio de 16 euros, son imposibles de encontrar estos días en los mercadillos de Cataluña, pero en la web oficial también es bastante complicado. Ha habido miles de peticiones desde diferentes puntos de España, de forma que hay que un tiempo de espera de unos días para poder recibir el 'caganer' de Puigdemont a domicilio. Algunos clientes tienen dudas de que puedan tener su figura antes de Navidad.
La figura decorativa de Puigdemont ha competido con la del exmajor Josep Lluis Trapero por ser la más vendida de estas Navidades. No obstante, una vez que fue cesado tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución se retiró de la circulación el 'caganer' del que fuera jefe de los Mossos d'Esquadra, de modo que ya no se puede comprar. En aplicaciones de segunda mano tampoco se encuentra disponible.
La figura del 'caganer' siempre se ha asociado al Belén navideño. Según los promotores de estas figuras, la intención era "ilustrar a los elementos tradicionales que estuvieron presentes en el nacimiento—pastores, ángeles, los tres reyes magos, el rabadán, el averío, el río...— con tal de acercar este mundo feliz y navideño al día a día de las familias. No obstante, a pesar de que añadir el caganer es una costumbre propia de Cataluña y la Comunidad Valenciana, también encontramos hombrecillos similares en Murcia, Nápoles y Portugal cuyo nombre se convierte en cacones, pastore che caca i cagoes, respectivamente".
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