La cifra de personas con COVID-19 que han ingresado en el Hospital Arnau de Vilanova de Lleida se han triplicado en los últimos diez días, por lo que el Departamento de Salud y el Instituto Catalán de la Salud (ICS) han tomado medidas para preservar su funcionamiento ante la posible llegada de más casos próximamente.
La consellera de Salud, Alba Vergés, ha informado en una rueda de prensa en el hospital de Lleida, acompañada por el alcalde de la ciudad Miquel Pueyo, y el gerente del ICS en Lleida, Ramon Sentis, que si el día 22 de junio había ingresadas 6 personas en planta y 4 en la UCI con COVID, este viernes ya son 21 en planta y 6 en UCI.
Para preservar el buen funcionamiento del hospital, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) ha instalado un hospital de campaña móvil ante las urgencias del centro sanitario, con capacidad para un centenar de personas, que servirá para hacer un cribado, mantener un circuito limpio de coronavirus y como sala de espera hasta que los pacientes reciban el resultado de PCR.
Vergés también ha pedido a su homóloga de Aragón que los pacientes de la Franja aragonesa, que normalmente suponen el 10% de las urgencia que atiende el hospital de Lleida, no acudan a este hospital y sean derivados al de Barbastro (Huesca).
Actualmente son 130 los casos positivos detectados en ocho brotes activos en la región sanitaria de Lleida, básicamente en la comarca del Segrià, donde hoy cuatro trabajadores de una cuarta empresa hortofrutícola han dado positivo, sin contar con un noveno brote en la Val d'Aran.
