Berlín, 15 sep.- El emir de Catar, Tamim al Hamad al Zani, garantizó hoy ante la canciller alemana, Angela Merkel, que su país no financia al Estado Islámico (EI), al tiempo que ratificaba su apoyo a la alianza internacional contra el yihadismo auspiciada por Estados Unidos.
"Catar nunca financiará ni apoyará el terrorismo, ni en Siria ni en Irak", afirmó el mandatario catarí, en una comparecencia con la canciller al término de la reunión mantenida en Berlín, centrada tanto en la cooperación comercial bilateral como en la lucha contra el EI.
Merkel aseguró haber abordado "abiertamente" con el emir las "presunciones" difundidas en los medios, según las cuales desde Catar se estaba apoyando al EI, y dijo no tener "razones para dudar" de la veracidad de las palabras de su interlocutor.
Por otro lado, tanto la canciller como el emir admitieron diferencias respecto al conflicto de Oriente Medio -en alusión a la cercanía de Catar con la milicia islamista de Hamás-, aunque destacaron la "coincidencia" de parecer respecto a que una solución al conflicto pasa por la fórmula de los dos Estados.
Ambos líderes comparecieron conjuntamente, tras una reunión de trabajo enmarcada por las gestiones multilaterales para implicar a los países árabes en la alianza contra el EI, así como los fuertes vínculos económicos bilaterales.
Merkel y el emir destacaron el interés recíproco en estrechar esos lazos y reforzar las inversiones, en ambas direcciones.
El emirato es el mayor inversor del mundo árabe en Alemania -con un volumen de inversiones cifrado en 18.000 millones de euros-, mientras que los grandes consorcios alemanes -como Volkswagen, Siemens, Hochtief y el Deutsche Bank- están fuertemente implicados en proyectos destinados a los Mundiales de Fútbol de 2022.
El emir admitió ante la canciller que se habían cometido "errores" relacionados con la organización de este torneo y se comprometió, asimismo, a trabajar para "mejorar" las condiciones de trabajo de los extranjeros empleados en los Mundiales.
Merkel, por su parte, defendió los negocios armamentísticos entre ambos países, incluida la venta a Catar de 62 blindados de del tipo "Leopard", pese a los recelos que el emirato despierta en el propio Ejecutivo alemán, como evidenció un reciente rifirrafe bilateral.
El pasado agosto, Catar llamó a consultas al embajador alemán en el emirato a raíz de unas declaraciones del ministro de Cooperación y Ayuda al Desarrollo, Gerd Müller, que había relacionado al país con la financiación del EI.
Berlín zanjó la cuestión rápidamente y se disculpó por el "malentendido" provocado por ministro.
La de hoy fue la primera visita de Estado a Alemania del emir, de 35 años, quien en junio del año pasado asumió el cargo de su padre, Hamad bin Jalifa al Zani.
A esta encuentro seguirá, el próximo viernes, el que mantendrán en Cancillería la misma Merkel y el emir de Kuwait, Sabah al Ahmad al Sabah.
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