Karima Benyaich, embajadora de Marruecos en España, lejos de mitigar el conflicto en la frontera con Ceuta, ha asegurado que en las relaciones entre países hay actos que tienen consecuencias, "y se tienen que asumir", en velada referencia a la decisión de España de prestar atención médica, en un hospital de Logroño, al líder del Frente Polisario, Brahim Gali.
En declaraciones a Europa Press, antes de acudir a la convocatoria realizada por la ministra de Asuntos Exteriores , Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, la embajadora de Marruecos ha insistido en que hay "actitudes que no se pueden aceptar". Ha añadido que las relaciones entre países vecinos y amigos se tiene que basar en "la confianza mutua, que se tiene que trabajar y nutrir".
Por último, ha calificado de "inusual" la rapidez con la que ha sido convocada por la ministra española de Exteriores y ha señalado que no descarta que su Gobierno la llame a consultas en las próximas horas.
Por su parte, el presidente del Gobierno de España. Pedro Sánchez, ha afirmado que el Ejecutivo usará "todos los medios necesarios" para proteger la seguridad e integridad de Ceuta y Melilla. "La integridad de Ceuta como parte de nuestra nación, su seguridad y la tranquilidad de nuestros compatriotas y residentes allí están garantizadas por el Gobierno de España cuales quiera que sean las condiciones necesarias para ello y con todos los medios disponibles".
El jefe del Ejecutivo ha afirmado que "vamos a reestablecer el orden en sus ciudades" y que "seremos firmes ante cualquier desafío, eventualidad y bajo cualquier circunstancia". La integridad de Ceuta y Melilla están garantizadas por el Gobierno, con todos los medios disponibles", ha añadido Sánchez en una comparecencia pública.
Por su parte, la ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha trasladado a la embajadora de Marruecos en Madrid, Karima Benyaich, el "disgusto y "rechazo" del Gobierno por la entrada masiva de migrantes a Ceuta y para recordarle que el control de la frontera es una responsabilidad compartida entre los dos países.
Así lo ha explicado la propia ministra en declaraciones a la prensa tras haber recibido en la sede del Ministerio a Benyahich, subrayando que también le ha expresado el deseo del Gobierno de "mirar al futuro y evitar que actos como estos puedan volver a repetirse". Igualmente, ha pedido el "compromiso" de Marruecos para que quienes han entrado en las últimas horas en Ceuta puedan ser devueltos conforme a los acuerdos existentes.
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