El CGPJ pide protección para los jueces de Cataluña tras las pintadas a Llarena

  • También ha mostrado su solidaridad con los jueces y magistrados catalanes por su "labor constante, callada y meritoria". 
La casa del juez Llarena en Sant Cugat, con pintadas en su puerta.
La casa del juez Llarena en Sant Cugat, con pintadas en su puerta.
EFE

La Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se ha pronunciado este jueves sobre las pintadas que las juventudes de la CUP realizaron en la casa del magistrado Pablo Llarena. Por unanimidad han expresado "su más absoluto rechazo frente a las expresiones de apoyo a esas conductas criminales y a quienes las están alentando".

Además, el CGPJ considera que la situación obliga proteger a los magistrados y jueces que actúan en Cataluña, por lo que piden a las "autoridades competentes en materia de seguridad" que "adopten medidas de protección adecuadas y efectivas" para las personas y los bienes de los Magistrados afectados. 

El CGPJ se ha solidarizado con el juez y su familia que este miércoles sufrieron las pintadas de jóvenes de Arran que buscaban señalizar, una vez más, a Llarena y le acusaban de fascista. Un acto que no solo perjudica al magistrado, sino a todo su entorno, ya que uno de sus hijos se encontraba en la vivienda cuando se produjo el ataque. 

También, instan a la Fiscalía General del Estado, al Ministerio del Interior y al Departamento de Interior de la Generalidad de Cataluña que adoptan de inmediato "todas las medidas para la persecución de las personas y grupos que han participado en esos hechos delictivos".

En el comunicado emitido condenan toda "conducta de intimidación que pretenda dirigirse contra los Jueces y Magistrados que prestan servicio en Cataluña", a quienes han manifestado "su aliento y compromiso" y les reconocen "la labor constante, callada y meritoria que prestan día a día en beneficio de la comunidad".

Un día después de los hechos, tres personas, ataviadas con monos de trabajo de color blanco y rojo y con máscaras con el bigote de Dalí, han limpiado durante la noche la pintura amarilla del portal, según se aprecia en un vídeo que han difundido en las redes sociales.

Según la consellera de Justicia, un hecho aislado

La consellera de Justicia, Ester Capella, ha afirmado que las pintadas en la casa de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena no son "compartidas" por la mayoría de catalanes y son un acto "muy aislado", a diferencia de las "agresiones fascistas".

En una entrevista a la emisora Catalunya Ràdio, Capella ha subrayado que las pintadas de color amarillo que hicieron miembros de Arran son un "acto muy aislado". "Es un acto no compartido, la mayoría de la gente del país no comparte este tipo de acciones, ya que si en alguna cosa se caracteriza el movimiento independentista es porque es cívico y pacífico y se expresa de otra manera que no es señalando a las personas", ha sostenido la consellera.

Capella ha resaltado que cada vez que ocurre un caso así el Gobierno catalán lo estudia para analizar qué ha ocurrido y cómo se pueden "reconducir" este tipo de situaciones. En cualquier caso, ha insistido que se trata de actos "aislados", a diferencia -ha remarcado- de las "agresiones fascistas, de la ultraderecha". "Cuando hablamos, hablemos de todo", ha solicitado.

Mostrar comentarios