Cinco candidatos aspiran a mantener el legado de Simón Peres

  • El Parlamento israelí elegirá mañana al décimo presidente de la historia de Israel, un cargo meramente institucional al que aspiran cinco candidatos que tendrán como reto superar el prestigio internacional del cesante, Simón Peres, y el creciente protagonismo del primer ministro, Benjamín Netanyahu.

Javier Martín

Jerusalén, 9 jun.- El Parlamento israelí elegirá mañana al décimo presidente de la historia de Israel, un cargo meramente institucional al que aspiran cinco candidatos que tendrán como reto superar el prestigio internacional del cesante, Simón Peres, y el creciente protagonismo del primer ministro, Benjamín Netanyahu.

El jefe del Ejecutivo ha maniobrado, sin éxito, en los últimos meses para, primero, reformar una institución que entiende ensombrece su gestión y, después, para retrasar la votación, a la que concurre con la vitola de favorito uno de sus adversarios: el ex presidente del Parlamento Rubi Rivlin.

Miembro del Likud, el mismo partido que el propio Netanyahu, el actual diputado ya presentó su candidatura en la elección anterior, pero la retiró al conocer que su contrincante sería un hombre del calibre de Peres, que ha devuelto el prestigio a un cargo socavado por sus dos predecesores.

Considerado un político independiente, la prensa israelí asegura que, además del enfrentamiento con Netanyahu, cuenta con la animadversión de Sara, la influyente esposa del primer ministro.

"Siempre ha mantenido sus posiciones de forma independiente, incluso frente a primeros ministros fuertes como (el fallecido) Ariel Sharón y Netanyahu. Y eso es un buen atributo para la Presidencia", asegura hoy en su editorial el diario progresista "Haaretz".

Rivlin, que durante la presidencia de la Knesset abrió la mano a los partidos árabes, deberá competir con dos políticos de raza, un premio Nobel y un ex jueza del Tribunal Supremo, después de que el otro favorito, Benjamín Ben Eliezer, abandonara este fin de semana la carrera.

Diputado laborista de una larga trayectoria y ex viceprimer ministro, Ben Eliezer anunció su adiós el sábado después de que las sospechas de corrupción por la compra de un lujoso apartamento en la costa concluyeran en un interrogatorio policial bajo apercibimiento.

El que fuera primer gobernador militar israelí de Cisjordania y Gaza contaba con apoyos entre los israelíes de origen askenazí y sefardí, así como con muchos de los diputados árabes y ultraortodoxos que ahora se desconoce de que lado recaerán.

En este contexto, el diario "Haaretz" eleva hoy las posibilidades de Dalia Dorner, ex miembro del Tribunal Supremo y conocida por su defensa de los derechos humanos.

Nacida en Estambul, Dorner abandonó el Tribunal Supremo en 2004 al cumplir los 70 años y tras once de trabajo, y ahora es profesora en la Universidad Bar-Ilán, en Tel Aviv.

Conocida por su defensa de la igualdad -fomentó leyes como la que permite a la mujer recibir entrenamiento como piloto de combate o la que amplió los derechos de los homosexuales- es una de las candidatas preferidas de los movimientos de izquierda.

El "Haaretz" asegura que a Rivlin le lastra su apoyo a la creación de un solo Estado, mientras que de Dorner se desconocen sus inclinaciones políticas.

Junto a ellos, dos políticos de larga trayectoria compiten por el cargo.

Dalia Itzik, hija de judíos iraquíes, cuenta a su favor con el hecho de haber sido la primera mujer en presidir el Parlamento israelí entre 2006 y 2009, cuando era miembro del partido de centro-derecha Kadima, fundado por Sharón.

Además, une su experiencia en labores de gobierno, ya que fue ministra de Medio Ambiente en 1999, año en el que se sumó al partido "One Israel", una escisión "centrista" del partido laborista liderada por el ex primer ministro Ehud Barak.

De vuelta al seno del laborismo, fue ministra de Industria y Comercio (2001-2002) y líder de la oposición, antes de decantarse por Kadima.

Y la presidencia no le resulta extraña: en julio de 2007, cuando el entonces presidente, Moshe Katzav, se vio obligado a dimitir por un escándalo de corrupción, asumió su puesto hasta la designación de Peres.

Ya antes, había ejercido la jefatura del Estado por baja del propio Katzav durante tres meses.

Meir Sheetrit, forjado en la derecha, también atesora una larga carrera política, siempre adscrito a partidos de derecha (Likud y Kadima) y centro-derecha, "Hatnua", en el que actualmente milita como diputado.

Fue ministro de Interior, Vivienda, Finanzas, Justicia, Transporte y de Educación, Cultura y Deporte.

La mejor carta de presentación para el último de los candidatos, Dan Shechtman, es el premio Nobel de Química logrado en 2011 por sus descubrimiento de los cuasicristales.

Shechtman, sin experiencia política, sería el segundo científico en la presidencia de Israel, tras el biofísico y político laborista Ephraim Katzir.

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