Pekín, 23 ene.- Un hombre que regresó al pueblo para Año Nuevo tras permanecer durante años en la ciudad, detonó los explosivos que llevaba atados a su cuerpo y causó la muerte a sí mismo y cuatro personas más, además de heridas a seis en la provincia central china de Hunan, informó hoy la policía local de Lianyuan.
Al parecer, el origen de la disputa que llevó al hombre, de apellido Liao, al acto criminal, se encuentra en las rencillas familiares por la explotación de la tierra.
Según la policía que desarrolla la investigación, Liao detonó los explosivos que llevaba atados al cuerpo frente a la mesa donde cenaba la familia de su primo en el pueblo de Tielu.
Tanto el autor de la matanza como otra persona fallecieron en el acto, mientras que de las trasladadas al hospital, tres fallecieron y seis permanecen estables.
Según la policía, además de Liao fallecieron su primo, con el que estaba en desacuerdo, los padres de este y un menor.
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