Concluye el juicio contra el intelectual uigur Ilham Tohti sin veredicto

Pekín, 18 sep.- El juicio contra el intelectual uigur Ilham Tohti, acusado de separatismo, concluyó hoy en la región china de Xinjiang sin conocerse el veredicto y sin que se sepa cuándo se anunciará.

Tohti, de 44 años, se sentó hoy por segundo día en el banquillo de los acusados por supuestamente "liderar un grupo separatista de ocho personas", un delito que el académico consideró "infundado" y que, en caso de culpabilidad, puede acarrearle desde diez años de cárcel hasta la pena capital.

La Fiscalía basa principalmente las acusaciones contra Tohti, conocido por ser una de las voces defensoras de la comunidad musulmana uigur en China, en la página web "Uyghur Online" que él abrió en 2006 junto a varios estudiantes a los que impartía clase en una universidad de Pekín y en la que publicaba artículos sobre la situación en la región de Xinjiang y de su etnia.

Después de que ayer se declarara inocente, el intelectual uigur pudo hoy defenderse durante una hora y media en el juicio, donde declaró que "nunca" ha organizado un grupo criminal para "dividir el país", ni "nunca" se ha dedicado a actividades separatistas, según explicó a Efe por teléfono uno de sus abogados, Liu Xiaoyuan.

Tohti aprovechó la ocasión para pedir que su caso fuera llevado al tribunal popular intermedio de Pekín, para que sea juzgado junto al resto de estudiantes detenidos y sospechosos de pertenecer al presunto grupo separatista liderado por Tohti.

Al parecer, siete de sus alumnos de la Universidad Minzu de la capital -especializada en etnias-, donde Tohti era catedrático, fueron arrestados y serán juzgados en un proceso distinto al del intelectual.

Algunos activistas, como Hu Jia, creen que las autoridades han presionado a los estudiantes para que declaren en contra de su profesor y aporten pruebas para declararle culpable. Los abogados aventuraron hoy que la corte le impondrá diez años de prisión.

"Si el tribunal de Urumqi insiste en encargarse de este caso, se debe llevar a cabo un juicio justo, y eliminar cualquier injerencia del poder ajeno a la ley", pidió hoy Tohti en el Tribunal Popular Intermedio de Xinjiang, donde ha sido juzgado bajo una extrema vigilancia policial.

Unas cincuenta personas presenciaron el juicio contra Tohti, entre ellas su esposa, Guzailai Nu'er, y algunos familiares más, además de corresponsales de diversos medios de comunicación chinos, según precisó su letrado Liu, quien expresó su temor de que éstos utilicen las grabaciones para hacer propaganda de la campaña antiterrorista lanzada por el régimen chino y que apunta a los uigures como principal objetivo.

Tras el final del proceso hoy, que comenzó a primera hora de la mañana y terminó a última de la tarde, la esposa de Tohti rompió a llorar al salir de la sede judicial, acompañada de familiares y abogados, quienes se marcharon caminando despacio y en silencio, según pudieron constatar los diplomáticos extranjeros desplazados al lugar.

Representantes de la Unión Europea y de Estados Unidos trataron hoy de nuevo de entrar al juzgado para asistir al proceso, aunque sin éxito.

Estos representantes, así como varias organizaciones de derechos humanos, volvieron hoy a pedir la liberación de Tohti, cuyo juicio consideran "sin sentido".

El proceso "nunca se tenía que haber celebrado. Tohti era un académico moderado que abogaba por la necesidad de reforma en la política de Pekín respecto a los uigures", sentenció Frances Eve, investigadora de la ONG Chinese Human Rights Defenders.

En declaraciones a Efe, Eve aseguró que "criminalizando sus opiniones, el Gobierno está reduciendo el ya limitado espacio para la solución pacífica a las tensiones étnicas en Xinjiang".

Y es que, según alertan varios grupos de derechos humanos, el castigo a Tohti sólo avivará la violencia que ya se vive en Xinjiang -donde han muerto cien personas tan sólo este verano por enfrentamientos étnicos- y en otras zonas de China, después de que la violencia haya desembocado en graves atentados en diversos puntos del país.