Condenado a muerte por provocar explosiones en una sede del Partido Comunista

  • Un tribunal chino ha condenado hoy a muerte a Feng Zhijun, un ex convicto acusado de la serie de explosiones que causaron un muerto y ocho heridos en la sede provincial del Partido Comunista de China (PCCh) en la ciudad central china de Taiyuan el pasado noviembre, informó la agencia oficial Xinhua.

Pekín, 28 abr.- Un tribunal chino ha condenado hoy a muerte a Feng Zhijun, un ex convicto acusado de la serie de explosiones que causaron un muerto y ocho heridos en la sede provincial del Partido Comunista de China (PCCh) en la ciudad central china de Taiyuan el pasado noviembre, informó la agencia oficial Xinhua.

Feng, quien dijo que no apelaría la sentencia, fue condenado este lunes por el Tribunal Popular Intermedio de Taiyuan.

El condenado, que estuvo anteriormente nueve años en prisión por robo, fue capturado el 8 de noviembre y admitió haber colocado los explosivos caseros.

Efectivos policiales registraron entonces el domicilio del acusado, donde encontraron más artefactos explosivos, y requisaron el vehículo que según se cree utilizó el agresor para llevar las bombas, al parecer recipientes cargados con metralla.

Las explosiones ocurrieron a comienzos de noviembre frente a la sede provincial del PCCh, en un momento sensible para la formación política, dado días después se celebraba un decisivo plenario del grupo en el poder.

El suceso además ocurrió pocos días después de que cinco personas murieran y 40 resultaran heridas cuando un vehículo se incendió en la plaza de Tiananmen en Pekín, uno de los lugares más simbólicos para el régimen.

Las explosiones en edificios oficiales son raras en Chinas, pero hay algunos precedentes, por ejemplo en 2011, cuando el campesino Qing Mingqi lanzó un ataque suicida en el que murieron él y otras dos personas en las cercanías de unas oficinas gubernamentales en la ciudad de Fuzhou, en el sureste del país para protestar contra la expropiación de sus tierras.

En julio de 2013, un peticionario discapacitado hizo estallar un pequeño artefacto explosivo en el aeropuerto de Pekín para llamar la atención sobre su minusvalía, causada por la paliza que le dieron unos guardias de seguridad.

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