Conmebol: el reto de salir a flote tras el escándalo de corrupción

  • Con el Congreso que se celebrará el martes para elegir nuevas autoridades, la Conmebol busca salir a flote del devastador huracán del escándalo de la FIFA que derivó en la detención de los tres últimos presidentes del organismo sudamericano.

La entidad deportiva de la región iniciará su nueva etapa con la proclamación del paraguayo Alejandro Domínguez, de 44 años, como candidato de consenso para presidir la entidad hasta el 2019 en reemplazo de su compatriota Miguel Angel Napout, quien dimitió tras ser detenido en diciembre último.

El consenso logrado sobre la candidatura de Domínguez, actual presidente de la federación de su país, facilitó los preparativos para el congreso extraordinario, sostuvo el actual presidente interino de la Conmebol, el uruguayo Wilmar Valdez, quien a último momento desistió de su postulación a la presidencia.

Valdez dijo que renunció a su candidatura a fin de buscar una nueva etapa de la entidad sudamericana integrada por diez países, a favor de la claridad y transparencia.

"Tiene que haber un antes y después en todo lo que pasó", afirmó el uruguayo al asegurar que desea que se profundice "la implementación de medidas de transparencia y control que garanticen una eficaz y rigurosa administración de las operaciones económicas y procesos operativos de la Conmebol".

La Confederación Sudamericana de Fútbol, conocida como Conmebol, también anunciará el martes oficialmente su apoyo al ítalo-suizo Gianni Infantino como candidato para presidir la FIFA en reemplazo de Joseph Blatter, durante el Congreso se celebrará el 26 de febrero en Zúrich en el marco del escándalo del fútbol mundial.

"La Conmebol apoyará a Infantino. Entre la UEFA y la Conmebol existe un vínculo muy fuerte, histórico, una antigua cooperación", dijo a la AFP una fuente del organismo.

La 'Conmebol-gate' ha puesto tras las rejas a trece altos jerarcas del fútbol de la región, entre ellos sus tres últimos expresidentes, el paraguayo Nicolás Leoz, el uruguayo Eugenio Figueredo y el también paraguayo Juan Ángel Napout.

De los dirigentes que figuraban como presidentes de las 10 asociaciones sudamericanas en 2013, año en que la Conmebol firmó unos cuestionados derechos de televisación aceptando millonarios sobornos, ninguno se encuentra hoy al frente de sus entidades y gran parte de ellos están bajo reclusión carcelaria o domiciliaria.

Estados Unidos los acusa de crear y poner en marcha un multimillonario esquema de corrupción que incluye, entre otros delitos, pagos de sobornos por millones de dólares para vender derechos de televisación y comercialización de torneos y amistosos internacionales, utilizando el sistema financiero de ese país.

El lujoso edificio de la Conmebol, en las afueras de Asunción, gozaba de inmunidad como las embajadas, hasta que el año pasado el Congreso paraguayo le quitó ese privilegio.

Dominguez asumirá la presidencia de la Conmebol después de las detenciones de sus tres últimos presidentes, el uruguayo Figueredo y los paraguayos Leoz y Napout.

Será el quinto presidente en tres años, luego de las gestiones de Leoz, Figueredo, Napout y la actual interina de Valdéz.

Leoz (1986-2013), de 87 años, cumple prisión domiciliaria en Asunción y se encuentra sujeto a un pedido de extradición de la justicia estadounidense, acusado de varios delitos como sobornos y lavado de dinero.

Figueredo (2013-14), también exvicepresidente de la FIFA, está procesado y encerrado en una prisión de su país, mientras que Napout (2014-15) permanece en Nueva York con prisión domiciliaria.

Otros acusados y procesados son el ex secretario general de la entidad, el argentino José Luis Meszner, el tesorero boliviano Carlos Chávez, el colombiano Luis Bedoya y el ecuatoriano Luis Chiriboga.

También figuran en la lista de imputados el ex secretario general del organismo, Eduardo Deluca, el ex tesorero Romer Osuna, y el ex presidente de la federación de Perú, Manuel Burga.

La asamblea de elección de autoridades del martes buscará dar vuelta a la página de pesadillas para la Conmebol cuyas nuevas autoridades se plantean modificar los reglamentos de la institución deportiva sudamericana.

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