Lazos históricos

En qué consiste el Tratado de Amistad entre Argelia y España firmado en 2002

El país argelino anunció ayer, miércoles 8 de junio, que suspendía el documento acordado con España hace 20 años por la posición de nuestro país en relación con el Sáhara Occidental.

Pedro Sánchez con el presidente de Argelia
En qué consiste el Tratado de Amistad entre Argelia y España firmado en 2002.
Europa Press

La decisión de Pedro Sánchez en relación con el Sáhara Occidental ha provocado que Argelia rompa sus el principal texto que protege las relaciones de amistad y cooperación con el país. Este mismo miércoles, 8 de junio, confirmaban la suspensión del conocido como Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España, un documento que firmó en 2002 el fallecido presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, y el expresidente José María Aznar, con el objetivo de mejorar las relaciones de paz en el Mediterráneo.

A pesar de las múltiples reuniones que se han celebrado a lo largo de estos 20 años, la relación entre ambos países se ha visto tambaleada por la decisión del Gobierno de apoyar a Marruecos en la propuesta autonomista sobre el Sáhara. Un giro en la postura española que carece de apoyos, a excepción del PSOE, dentro entre los grupos parlamentarios. De hecho, a lo largo de la sesión de control que se celebró ayer, el presidente Pedro Sánchez defendió que la propuesta de Marruecos es "la base más sólido, creíble y realista" para resolver el conflicto sobre este territorio.

Compromisos y obligaciones

Cabe destacar que este documento, publicado en el BOE en 2003, es el que ha regido hasta ahora sobre el desarrollo de las relaciones entre ambos países. En él, se contemplan algunos principios como el respeto a la legalidad internacional, la igualdad soberana, la no intervención de asuntos internos o la abstención de recurrir a la amenaza y uso de la fuerza en caso de conflicto. Este acuerdo también proporciona buenas relaciones con el resto de Europa: "Conocedores de la importancia que tienen los estrechos vínculos de asociación establecidos entre la Unión Europea y Argelia, plasmados en el Acuerdo de Asociación, como vía para contribuir al objetivo de convertir la región mediterránea en una zona de prosperidad compartida, Decididos a impulsar la cooperación en el marco de los foros internacionales de seguridad y otros proyectos que puedan establecerse en el futuro, a fin de colaborar al mantenimiento de la paz, la estabilidad y la promoción del bienestar en la región", se indica en el tratado.

Para las autoridades argelinas, el apoyo de España a Marruecos supone una "violación de las obligaciones jurídicas, morales y políticas" en el Sáhara Occidental. Por lo que respecta a la legalidad internacional, el documento indica que ambos países tienen el "compromiso a cumplir de buena fe las obligaciones que hayan contraído de acuerdo con los principios y normas del Derecho Internacional y con los Tratados u otros acuerdos, conformes al Derecho Internacional, en los que son parte". Además, en este contexto "constituye un factor esencial del mantenimiento de la paz y la seguridad en el mundo y de la promoción de las relaciones de confianza y de cooperación entre los Estados".

Otro punto importante es la no intervención en asuntos internos, "las Altas Partes Contratantes se abstendrán de cualquier intervención directa o indirecta, individual o colectiva, en los asuntos internos de la otra parte". Para ello, será esencial que se abstengan de cualquier acto de coerción militar, política, económica o de otros tipos.

Posibles consecuencias

Los primeros efectos de esta ruptura es que afectará principalmente las importaciones y exportaciones que se realizan con el país. Según datos del ICEX, más del 90% de las importaciones de Argelia a España son combustibles. Además, Argelia ha ordenado la congelación de las domiciliaciones bancarias relacionadas con las operaciones de comercio exterior de productos y servicios desde y hacia España.

Argelia es hoy en día el principal proveedor de gas para España, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha recalcado que "no está en riesgo en ningún caso" y que Argelia siempre ha sido un socio fiable. Ha apuntado, además, que no tienen ningún "indicio" de que se vaya a cuestionar el suministro y, a renglón seguido, ha asegurado que tienen la mano tendida para reconstruir la relación.

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