El Gobierno tiene apalabradas casi 53 millones de dosis del antídoto contra la Covid por la vía europea. La mayoría, según el calendario del Ministerio de Sanidad, llegarán en el primer trimestre de 2021. Otras se retrasarán hasta 2022. Así lo apuntan las previsiones del Ejecutivo de Pedro Sánchez, que hoy ha dado un paso más para blindar la llegada de las vacunas. El Consejo de Ministros ha sellado este martes la autorización para la adquisición de vacunas contra la COVID-19. En concreto, a propuesta del Ministerio de Hacienda, el Gobierno ha dado luz verde a un aumento del margen presupuestarios para que Sanidad pueda tramitar los acuerdos de compra de vacunas de Janssen, Moderna y CureVac, tres de las candidatas a frenar la pandemia más avanzadas.
"El Consejo de Ministros ha aprobado un acuerdo, propuesto por el Ministerio de Hacienda, por el que se elevan los límites presupuestarios para que el ministerio de Sanidad pueda tramitar los acuerdos firmados con la Comisión Europea para el suministro de vacunas", ha informado la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero. La portavoz ha reiterado la información que Sanidad ya puso sobre la mesa: el plan del Ejecutivo de coalición es que las vacunas empiecen a suministrarse en enero y su administración será completamente gratuita.
La Comisión Europeo ya sembró el terreno que ahora asienta el Gobierno de coalición. La autorización del Consejo de Ministros pretende dar cumplimiento al plan de reparto definido en Bruselas, que parte del entendimiento entre la autoridad comunitaria y algunos de los laboratorios más adelantados en la carrera por el antídoto. En el 'racionamiento' europeo de estos fármacos a España le corresponderían 52.707.888 dosis de las tres farmacéuticas citadas.
Así, de acuerdo con lo establecido en el acuerdo entre Janssen y la Comisión, a España le correspondería por población, 20.875.725 vacunas, que se distribuirán, según lo agendado, a lo largo de 2021. De la partida reservada a Europa apalabradas con la estadounidense Moderna -que ya ha solicitado el aval europeo para su 'uso de emergencia'- , a nuestro país le corresponderán por población 8.348.979 dosis iniciales. Esta última exige dos dosis para lograr la protección contra el virus, lo que obliga a dejar en la mitad el espectro de población que se beneficiará de esta primera serie.
Por último, Bruselas también ha pactado con CureVac un acuerdo con obligación de compra que supone la adquisición para Europa de 225 millones de dosis de una vacuna para el SARS-CoV-2. Del último paquete, a España llegarán 23.483.184 dosis que, previsiblemente, empezarán a distribuirse entre enero y marzo del año 2022. Esta vacuna también exige esas dos dosis por inmunización que, al igual que en los casos anteriores, rebaja el número de inmunizaciones a la mitad de estas dosis.
Montero ha abordado la cuestión del calendario vacunal: "Tengo una absoluta certeza de que una vez que se aprueben y se hayan completado todos los ensayos clínicos se cumplen todas las condiciones de seguridad para ser administradas". Y ha insistido en que se respetará el orden de prioridades derivado de esa clasificación de los españoles en los 15 grupos de población de los que informó Sanidad el pasado viernes. "Estaríamos encantados, los ministros, en ser los primeros en ponernos las vacunas, y el propio presidente... pero estaremos cuando nos toque", ha zanjado la portavoz antes de recordar que, en los plazos que baraja Sanidad, hay grupos que tienen prioridad por ser más vulnerables.
La segunda ola amaina en España. Así lo confirman los datos que reportó la cartera de Salvador Illa este lunes. Pese al retraso que sufren las estadísticas de viernes a lunes, la huella del virus fue ayer mucho menor de la que dejaron los fines de semana precedentes. La cartera sumó 401 muertes y 19.976 nuevos contagios, tras 72 horas en blanco. El cómputo afianzó el descenso de la curva, así como de la incidencia del virus en el país, que ya se sitúa en los 275,51 casos por cada 100.000 habitantes en los 14 días previos.
Pese al descenso de los indicadores, la saturación de los hospitales aún alerta, con 26,74% de las camas de UCI ocupadas por pacientes de la Covid-19. Vienen semanas duras y las navidades urgen a rebajar los niveles de transmisión lo máximo posible antes de las celebraciones. El mensaje desde el Gobierno es unánime y exige "cautela". "Casi lo tenemos. Estamos doblegando esta segunda oleada, pero esto tiene que ser un estímulo para seguir manteniendo las medidas de seguridad", ha concluido Montero.
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