Consternación y condena en Galicia por la muerte de un hincha del Deportivo

  • La Xunta y los partidos políticos en Galicia han expresado hoy su consternación y condena de la violencia tras la muerte de un aficionado del Deportivo de La Coruña en una reyerta entre ultras del club gallego y del Atlético de Madrid en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón.

A Coruña, 30 nov.- La Xunta y los partidos políticos en Galicia han expresado hoy su consternación y condena de la violencia tras la muerte de un aficionado del Deportivo de La Coruña en una reyerta entre ultras del club gallego y del Atlético de Madrid en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón.

Francisco Javier, Jimmy, uno de los miembros de la sección más ultra relacionada con los Riazor Blues que, paradójicamente, lleva por nombre 'Los Suaves', todavía se debatía entre la vida y la muerte en un hospital madrileño cuando el partido entre el Atlético y el Deportivo, que no fue suspendido, concluyó con victoria rojiblanca.

Jimmy, que deja un hijo pequeño, es el segundo aficionado del conjunto blanquiazul que pierde la vida en un incidente en los últimos once años.

Según los últimos datos, los detenidos por estos gravísimos hechos ascienden a 21, seis de ellos con antecedentes por lesiones, robos con violencia, daños y desórdenes públicos, amenazas y robos con fuerza.

El mundo del fútbol y los técnicos de ambos equipos han condenado la violencia y han transmitido el pésame a los familiares del aficionado del Deportivo de La Coruña, un gesto al que se ha sumado el arco político gallego y herculino.

El máximo mandatario de Galicia y presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, ha condenado "toda manifestación de violencia" y ha mostrado su colaboración "para evitar que este tipo de acontecimientos se vuelvan a repetir".

Por su parte, el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira, ha incidido en que la Justicia "debe actuar para investigar y esclarecer todo lo ocurrido" y "que todo el peso de la Ley recaiga sobre los autores de la salvaje agresión que ha causado el fatal desenlace".

Tras manifestar su "dolor y consternación" y trasladar su "hondo pesar" a los familiares y allegados del hincha deportivista, ha sostenido que "es necesario que, de una vez por todas, clubes y organismos deportivos pongan en marcha actuaciones para apartar y erradicar del fútbol a delincuentes que buscan en el deporte la excusa para practicar la violencia indiscriminada".

Desde el PSOE de A Coruña han expresado en declaraciones a Efe su repulsa a la violencia y han enviado sus muestras de cariño a los familiares y amigos de Jimmy, cuya muerte ha dejado "abatido" al portavoz de Esquerda Unida en la capital herculina, César Santiso.

"Como persona, coruñés y deportivista me siento abatido. Quiero expresar mi cariño, solidaridad y condolencias a los familiares y amigos del fallecido", ha asegurado.

En un comunicado, Santiso ha recriminado a "radicales fascistas neonazis madrileños" este "asesinato" y ha considerado "inaudito" que el partido que enfrentaría a los equipos de ambas aficiones tres horas después "no fuera suspendido".

Al hilo de ello, el BNG, después de condenar también este "asesinato", ha cuestionado el "papel de la Policía Nacional", a la que acusa de actuar con "tibieza", y ha criticado que la Federación Española no suspendiese el encuentro, que no fue declarado "de alto riesgo pese a ser la hinchada ultra del Atlético muy violenta con las aficiones de las nacionalidades históricas del Estado español".

Por ello, el PSOE pedirá mañana la comparecencia urgente en el Congreso del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, para que explique las medidas preventivas que tomó su departamento en torno al encuentro y "cuál fue la razón" que llevó a los enfrentamientos, que Interior debería haber previsto por tratarse de peleas entre grupos de ideologías "completamente opuestas", ha señalado.

De hecho, hace varias semanas que los cabecillas del Frente Atlético y los del Riazor Blues se habían retado para pelearse horas antes del partido, una reyerta en la que se enfrentaron 200 radicales y que al parecer se prolongó 45 minutos antes de que llegaran los agentes.

La violencia trascendió la capital y llegó a A Coruña, donde seis encapuchados agredieron a dos personas, que resultaron heridas, en un bar de A Coruña en el que se reúnen aficionados rojiblancos.

Ante esta situación, José Ignacio Wert, ministro de Educación, Cultura y Deporte, ha señalado no se ha "sido lo suficientemente contundentes con los ultras" y ha indicado que se ha convocado la comisión permanente de la comisión antiviolencia.

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