La activación de los llamados coronabonos se está jugando en una partida de ajedrez que enfrenta, en estos momentos, a dos jugadores. A un lado de la mesa se sientan Pedro Sánchez (España), Emmanuele Macron (Francia) y Giuseppe Conte (Italia). Al otro, Angela Merkel y Mark Rutte (Holanda). La diplomacia y los 'sherpas' están actuando y desplegando sus redes para conseguir cerrar un instrumento de deuda europea del que nuestro país podría beneficiarse especialmente. El presidente del Gobierno ha tomado parte activa en esta negociación, según relatan fuentes de su entorno, junto a su vicepresidenta Nadia Calviño.
Son horas clave de cara al Consejo Europeo de este jueves a las 16:00 horas. España está peleando duro, muy duro, por que se apruebe este instrumento que viene reclamando desde hace unos días. El momento es decisivo: justo cuando Ursula von der Leyen ha anunciado un paquete de emergencia, después también de que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) haya avanzado su disposición a colaborar con los avales que se están empezando a activar y de que el Mecanismo de Estabilidad se haya activado, como ya hizo con la banca española en 2012. Se trata, en definitiva, de que la UE saque la artillería pesada como ya ha hecho la Comisión y el BCE.
Sánchez y su equipo de 'sherpas' han desplegado todas sus redes en los últimos días. Según explican fuentes del Gobierno, tanto el equipo de Presidencia como de la Vicepresidencia económica han mantenido intensas conversaciones con varios países a varias bandas con el objetivo de presentar una alianza en el Consejo. Son varios los aliados de España, Francia e Italia. Bélgica, Grecia, Irlanda, Portugal, Eslovenia y Luxemburgo también se han sumado al 'plan coronabonos'. Y no se descarta que en las próximas horas se produzcan más adhesiones.
Los movimientos entre bambalinas de Sánchez y Calviño han quedado plasmados por escrito en la carta remitida a Charles Michel. Ahí se puede observar claramente la presión que están ejerciendo los países de la 'coalición' contra el tándem de Alemania y Holanda. Las fuentes consultadas explican que esa misiva tuvo la iniciativa de Moncloa, que luego pasó al Elíseo para que Macron hiciera sus aportaciones y que, más tarde, recibió el visto bueno de Conte desde el Palazzo Chigi.
Las mismas fuentes incluyen en ese trabajo de preparación del Consejo de este jueves al equipo de Economía. Calviño, otra vez, recurriendo a sus contactos en Bruselas para intentar doblegar a Alemania. En este sentido cabe destacar la interlocución directa de la Vicepresidenta tercera con sus homólogos comunitarios para plasmar en ese documento una petición expresa de ayuda comunitaria ante la crisis sanitaria y económica en la que ya está inmerso el viejo continente.
Sánchez, por tanto, se conectará a la vídeoconferencia de este jueves con la labor del "trabajo hecho" gracias a una estrategia "integral" que también ha implicado a dos personas de la máxima confianza del presidente: Manuel de la Rocha, director del Departamento de Asuntos Económicos de Presidencia, y José Manuel Albares, exresponsable del Departamento de Internacional de Moncloa y nuevo embajador en París desde hace unas semanas. Fuentes del entorno de Sánchez se mostraban ayer esperanzadas en lograr por fin el acuerdo que no se alcanzó en el Eurogrupo de esta misma semana.
El contenido de la carta a Michel
La carta a nueve manos iniciada por Sánchez está dirigida a Michel pero, en realidad, es una forma de presión a Merkel para que ceda con los coronabonos. Sin el 'sí' de Berlín no llegarán. Por eso le presentan al presidente del Consejo Europeo una situación límite: "Las medidas extraordinarias que estamos adoptando para contener el virus afectan negativamente a nuestras economías a corto plazo; necesitamos por lo tanto llevar a cabo acciones extraordinarias para limitar el daño económico y preparar los próximos pasos; esta crisis global necesita una respuesta coordinada a nivel europeo", insta el grupo pro-coronabonos.
"Los Estados miembros están llamados a desempeñar su papel y garantizar que el menor número posible de personas pierdan su trabajo debido a los cierres temporales de todos los sectores de la economía, que el menor número de empresas vayan a la quiebra, que la liquidez continúe fluyendo hacia la economía y que los bancos continúen ofreciendo préstamos a pesar de los retrasos en los pagos y el aumento de riesgos", recuerdan.
"Necesitamos reconocer la gravedad de la situación y la necesidad de nuevas acciones" y "esto requiere la activación de todos los instrumentos fiscales comunes existentes para apoyar los esfuerzos nacionales y garantizar la solidaridad financiera, especialmente en la Eurozona", expresan en la carta. Es decir, activar los eurobonos, que funcionarían como "un instrumento de deuda común emitida por una institución europea para obtener fondos en el mercado sobre la misma base y en beneficio de todos los Estados miembros, garantizando así una estabilidad a largo plazo en la financiación de las políticas" en marcha.
Los eurobonos, insiste el grupo de Sánchez, deben tener "un tamaño suficiente y largos períodos de amortización para ser" eficientes y "evitar riesgos de refinanciamiento ahora y en el futuro. Del mismo modo plantean "una financiación específica para el gasto relacionado con el coronavirus en los presupuestos de la UE, al menos para los años 2020 y 2021, más allá de los anuncios ya realizados por la Comisión".
Alianza de socialdemócratas y populares
La carta de Charles Michel pidiendo los coronabonos ha logrado unir a varios líderes europeos de familias teóricamente rivales. La misiva la han firmado: Sophie Wilmès, primera ministra de Bélgica; Emmanuel Macron, presidente de la República Francesa; Kyriakos Mitsotakis, primer ministro de Grecia; Leo Varadkar, primer ministro de Irlanda; Giuseppe Conte, primer ministro de Italia; Xavier Bettel, primer ministro de Luxemburgo; António Costa, primer ministro de Portugal; Janez Janša, primer ministro de Eslovenia; y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno.
En Moncloa también están presionando para activar, una vez superada la crisis sanitaria, el llamado 'plan Marshall' que ha conseguido ser portada de Financial Times. "Apostamos por un gran 'plan Marshall' para impulsar un proceso de reconstrucción social y económica en la Unión Europea con todas las herramientas a nuestro alcance. Seguiremos defendiendo los intereses de España y Europa, que frente al coronavirus son los mismos", dijo Sánchez cuando presentó su segundo plan económico con hasta 200.000 euros en avales sobre la mesa.
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