Hace una semana, Quim Torra avisó al Gobierno: "Reclamaremos al Ejército para combatir el coronavirus cuando sea necesario". Hoy mismo, el conseller de Interior, Miquel Buch, ha asegurado que ya es el momento de pedir su ayuda o la de comunidades cercanas: "En lo referente a la seguridad, no se nos caerán los anillos por pedir ayuda a quien haga falta", ha destacado. Al ser preguntado por la petición de ayuda de le Generalitat a la Unidad Militar de Emergencias (UME) durante la rueda de prensa telemática, Buch ha afirmado que "es normal que se pida ayuda" para tareas concretas.
Ha criticado que se busque polémica o debate entre administraciones en este tema: "El tiempo lo dedicamos a velar por la salud de los catalanes y luchar contra el Covid-19", y ha dicho que es una pérdida de tiempo ahondar en este asunto. Sobre posibles nuevas actuaciones de la UME a petición del Govern, Buch ha sostenido que, en función de la situación de emergencia, verán si pedirlo, y ha añadido que "si la UME puede contribuir" pedirán su ayuda.
La Fira acogerá 300 camas y 615 sanitarios
En cuanto a la ampliación de espacios médicos, en la ciudad condal se va a utilizar la Fira de Barcelona para acoger 300 camas y 615 sanitarios, de la misma forma que se hiciera la Comunidad de Madrid con Ifema. La consejera de Salud, Alba Vergés, también ha comparecido esta tarde en rueda de prensa telemática y ha explicado que "el objetivo" es que estas 300 plazas puedan llegar a las 2.000, aunque ha apuntado que el espacio disponible es "absolutamente ampliable si se necesita" debido a las dimensiones de la Fira.
Los 615 profesionales, que estarán bajo las órdenes directas de un equipo del Departamento, se dividirán en médicos especialistas hospitalarios (15), profesionales de centros de atención primaria (120), enfermeros (120), auxiliares de enfermería (240) y celadores. Ha explicado que la atención sanitaria funcionará las 24 horas del día y que se efectuarán cinco turnos de trabajo, y ha añadido que se habilitarán espacios para los profesionales como zonas comedor o áreas de descanso. Se trata de "un equipo asistencial creado ad hoc" y que no estará bajo la supervisión de ningún hospital, sino que será una suerte de "infraestructura de todo el país".
Los bomberos se centran en los geriátricos
Al tiempo que la Generalitat suma efectivos a la lucha contra el Covid-19, los bomberos siguen siendo fundamentales para contener la expansión del virus. En Barcelona, han iniciado este sábado la desinfección de la Residencia Casal Asil, en el distrito de Sant Andreu, donde han fallecido una veintena de sus 220 residentes por el coronavirus, y el lunes trabajarán en otros centros, han confirmado a Efe fuentes del Ayuntamiento.
La intervención se produce después de que ayer la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, alertara de que 54 de los 213 decesos vinculados a la Covid-19 que se han registrado en la ciudad eran de ancianos residentes en geriátricos, lo que significa "una de cada cuatro muertes". El concejal de Seguridad, Albert Batlle, ha acudido esta mañana hasta el lugar, junto con el jefe de la unidad de los Bomberos, Antonio Cabeza, quien ha señalado en declaraciones a los medios que se han encontrado con "personas muertas, personas sedadas y personas sin síntomas" compartiendo espacios.
Los bomberos están separando a ancianos contagiados de otros que no lo están, buscando crear "zonas limpias" en el establecimiento. Los trabajos de desinfección de las cinco plantas de la residencia se espera que terminen durante el día y que el lunes se inicien en otros tres geriátricos. Actualmente, Barcelona cuenta con 255 residencias para personas mayores, en las que viven 20.000 personas y en 143 de las cuales, más de la mitad, hay "como mínimo un caso positivo", según los datos que ayer hizo públicos Ada Colau.
Varios hoteles acogerán ancianos enfermos con coronavirus
Los hoteleros también arriman el hombro en Cataluña. La Generalitat ha comunicado que reubicará en hoteles de Barcelona y área metropolitana a internos en residencias de ancianos que tienen coronavirus o síntomas compatibles con la enfermedad. La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha dicho este sábado en rueda de prensa telemática que se trata de ancianos de 16 centros de Barcelona, principalmente pequeños, cuyas instalaciones no permiten garantizar el aislamiento.
Los traslados se harán entre el fin de semana y principios de la próxima semana, los ancianos irán a tres hoteles diferentes y contarán con el apoyo del Centro de Atención Primaria (CAP) de referencia en cada lugar. Budó ha señalado que el objetivo es sacar a las personas enfermas "de las residencias que no pueden garantizar el aislamiento, para garantizar su atención y evitar el contagio" con otros internos de los centros.
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