Tras la reunión con las comunidades

Sanidad toma el mando: obliga a Ayuso a restringir las zonas con más contagios

Madrid capital y otras ciudades de su entorno tendrán que aplicar restricciones en todo su territorio y no por zonas sanitarias.

Salvador Illa, en la reunión con las comunidades
Salvador Illa, en la reunión con las comunidades
EFE

El Ministerio de Sanidad no espera a Madrid. A pesar de que la comunidad de Isabel Díaz Ayuso ha rechazado junto a otras comunidades el plan de Salvador Illa para restringir la movilidad y la actividad en las ciudades con una alta cifra de contagios, el Gobierno central ha anunciado que impondrá restricciones a las zonas que cumplan esos criterios. Entre las que estarán Madrid capital y otras ciudades de la región madrileña. Todo esto será publicado en una orden ministerial que firmará el propio Illa, que ha defendido que es suficiente con la mayoría del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, sin que sea necesario el consenso para aplicar estas medidas. 

Además de la capital del país, el resto de ciudades que tendrán que restringir sus movimientos son Alcalá de Henares, Alcobendas, Alcorcón, Fuenlabrada, Getafe, Leganés, Móstoles, Parla y Torrejón de Ardoz. El motivo es que todas ellas superan los baremos establecidos por Sanidad, como tener una tasa de más de 500 contagios por cada 100.000 habitantes, una tasa de PCR positiva superior al 10% y una ocupación de UCIs que sobrepasa el 35%. Según el ministro, Ayuso estará obligada a aplicar las medidas correspondientes de limitar la movilidad, los aforos y los horarios de los negocios. Algo que fuentes de la Comunidad de Madrid niegan, al considerar que no es de aplicación al no haberse aprobado la propuesta por unanimidad. 

"No contemplo que una decisión colegiada y que afecta a la salud pública no se lleve a cabo", ha señalado Salvador Illa en una rueda de prensa en Moncloa tras la reunión con las CCAA, en la que ha vuelto a destacar el alto número de casos de coronavirus en Madrid. Además, ha repetido su frase del pasado lunes de que "uno cuando va al médico quiere que le digan la verdad", para insistir en que la situación madrileña es "preocupante". "Tiene que hacerse efectivo", ha insistido el ministro, cuya decisión implica la restricción de derechos fundamentales a través de una orden ministerial. Algo que, sobre el papel, solo podría hacerse por medio de la aplicación del estado de alarma. 

El titular de Sanidad ha dedicado parte de su intervención al cambio de criterio de Madrid, que el martes llegó a un preacuerdo con el Gobierno central a través del Grupo COVID y que este miércoles ha rechazado los mismos términos pactados. Según Illa, esto es algo que "no entiende nadie, ni los madrileños ni los españoles", y ha defendido que si intervienen en la región es porque "tenemos que actuar para tomar el control de la pandemia en Madrid". Una afirmación que ha acompañado de los datos de positivos, ingresos hospitalarios y situación de las UCI que viven los hospitales de la región que gobiernan PP y Ciudadanos. 

Desde la Comunidad de Madrid ven muy distinto lo ocurrido. Hasta el punto de que rechazan tener que aplicar las restricciones marcadas por Sanidad, a pesar de que sus representantes las pactaron con el Gobierno central hace tan solo 24 horas. Según fuentes autonómicas, que una mayoría del Consejo Interterritorial de Salud haya apoyado la propuesta de Illa no obliga a que tomen esas medidas. Para ello, se escudan en que el reglamento de ese órgano colegiado implica que todos los acuerdos se aprueben por consenso. Algo que no se ha cumplido hoy, ya que el documento ha contado con 13 votos a favor, cinco en contra y una abstención. 

Ahora, la batalla política entra en un nuevo escenario. Los argumentos del Ministerio de Sanidad y de la Comunidad de Madrid chocan frontalmente, con el primero defendiendo que su actuación está avalada por la legalidad y la segunda negando que sea así y aludiendo a que no ha habido consenso para tomar dicha decisión. Mientras tanto, el coronavirus sigue avanzando en la autonomía sin que por el momento se noten los efectos de las medidas del Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso. Este miércoles, la Salud Pública madrileña ha registrado 3.814 casos nuevos de coronavirus, de los que 1.205 se asignan a las últimas 24 horas y el resto a días anteriores. Además, 52 personas han fallecido en hospitales, mientras que los pacientes en UCI ya son 484. A la vez, los pacientes hospitalizados han descendido hasta los 3.142.

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