Inés Arrimadas, ante el abismo de morir de éxito tras su victoria en Cataluña

  • Nicolás Redondo Terreros pronostica que los nacionalistas no le perdonarán la victoria y le harán un cordón sanitario. 
Arrimadas pasea con su marido como una ciudadana más
Arrimadas pasea con su marido como una ciudadana más

Dice Arrimadas que se siente como Frodo portando un anillo muy pesado. Lo ha confesado con la sonrisa de la victoria en la cara, pero con la carga de su cometido en la cabeza. Confía, dice, en los suyos, a los que llama 'la Comunidad del Anillo'. Va a necesitar su fuerza, de eso no hay duda. Es al menos los que le comentan dos guerreros veteranos en la Tierra Media de la política: Nicolás Redondo Terreros y Jaime Mayor Oreja, que le advierten: la batalla va a ser dura y el ejército rival, porque eso es ya el Parlament fragmentado, tiene un objetivo claro: ella. Coincide con ellos Andrés Herzog, otro luchador que sabe lo que es perder la guerra, pero que portó con UPyD muchas de las ideas que ella ahora defiende. ¿Logrará llevar el anillo a su destino, a reinar en una Cataluña en la que no mande 'Sauron', ese independentismo que ya ha demostrado que todo lo ve y todo lo escucha y que domina la Tierra media catalana desde los inicios de la democracia? ¿O perecerá políticamente en el camino, aplastada por constitucionalistas que la presionan e independentistas que la temen? ¿Morirá de éxito, la estrella política de los últimos tiempos?

"Arrimadas no va a morir de éxito, no, lo que va a hacer es pasarlo muy mal esta legislatura. Los nacionalistas no le van a perdonar haber ganado las elecciones y se lo van a hacer pagar. Es momento de apoyarla. Como ciudadano español me alegro de que haya ganado un partido español en Cataluña". Así de rotundo se muestra Nicolás Redondo Terreros, pese a ser un socialista de toda vida, (fue secretario general del PSE-EE entre 1997 y 2002). "Es que los partidos tienen vida propia, son muy importantes, pero en este caso, ha ganado un partido en unas elecciones que eran importantes para la democracia. Se puede ganar o perder, pero yo en este caso me alegro de esa victoria de Cs, aunque solo sea por sentido común".

Herzog bien sabe que los partidos van y vienen. Cree él que el legado de UPyD está muy presente en la victoria de Arrimadas. "Nosotros no le debíamos nada a nadie, éramos un partido nacido para defender la unidad y la Constitución, que apostaba sin complejos por la igualdad de todos los españoles. Rara vez triunfan al mismo tiempo las ideas y las personas que una vez las alumbraron. En todo caso lo importante es que las ideas acaben calando y realizándose, las personas vienen y van".

Inés Arrimadas, el diamante de Rivera
Arrimadas, el diamante en bruto descubierto por Rivera,

Otro político trascendental en la historia de su partido, en este caso el PP, Jaime Mayor Oreja, cree que "los constitucionalistas deben apoyar a Arrimadas. El proceso del nacionalismo se lleva fraguando durante años y no lo hemos entendido. Al plan Ibarretxe, un primer intento, le ha seguido el plan Puigdemont, y los resultados electorales demuestran que el nacionalismo sigue ahí pese a haber protagonizado una rebelión.

Oreja critica que se presione a Arrimadas, "porque al que gana no se le dice lo que tiene que hacer, se le deja hacer". En su opinión es hora de dar batalla "juntos, defender una idea de España ante los que la izquierda vacila". No acaba de tener mucha fe en ello Oreja, que sí cree que Europa y el orden internacional serán más implacables que España con los independentistas, porque esto que vive España no es propio, la convulsión que estamos viviendo es en toda Europa". Sí cree que los nacionalistas se van a unir en la aventura de lograr un referéndum legal.

Terreros también considera, pese a las notables diferencias que le separan de Oreja, que los nacionalistas "se van a comportar de forma grupal, se van a unir para hacer un cordón sanitario contra Arrimadas. Ni siquiera han tenido un mínimo respeto por el que gana (no se ha oído ninguna felicitación al respecto). Ahora Arrimadas debe tejer alianzas con los constitucionalistas para intentar que su victoria se vea reflejada en la mesa del Parlament, pero no le van a dejar muchas opciones", afirma poco esperanzado.

El político socialista, que fue capaz de aunar esfuerzos en su día con el PP en el País Vasco con la convicción de que la democracia y la necesidad de alternancia eran más importantes que las siglas cree que "el hecho de que Arrimadas haya ganado para no gobernar demuestra que no estamos aún ante una sociedad plenamente democrática", pero no pierde la esperanza. "Su victoria ha servido, claro que ha servido, unas elecciones no cambian 40 años de historia. Está claro que el Parlament se va a dividir en dos bloques enfrentados, lo que no ocurre en nuestras democracias más cercanas, pero serán los nacionalistas ahora los que se tendrán que poner de acuerdo y afrontar las consecuencias de la crisis en Cataluña, agravada por el procés. La desventaja respecto al Congreso es que aquí llegar a acuerdos va a ser muy complejo. Y serán los nacionalistas los que tendrán que demostrar si gobiernan que son capaces de afrontar esa crisis y ser eficaces, rotundos y responsables". En este sentido, Terreros se reafirma en la idea de que "nada está nunca decidido en política".

Herzog considera que a Arrimadas le corresponde ahora liderar con convicción una alternativa al régimen nacionalista. "Eso supone tomar la iniciativa, convocar a los partidos, unir a los demócratas, y liderar decisiones impopulares. Esa es la diferencia entre hacer política y hacer demoscopia", advierte.

Respecto al futuro de Arrimadas y Cs, Terreros cree que es evidente que a Cs le ha impulsado el hecho de su no compromiso histórico con los nacionalistas (de hecho nació para combatirlos) y ser un partido nuevo.

Herzog recuerda sus batallas contra el clientelismo y la corrupción. Perdió, o quién sabe, "porque un hombre con ideas nuevas es un loco hasta que sus ideas triunfan". Ahora parece que lo han hecho, al menos algunas de esas banderas que él defendió. Desea que Arrimadas "sea capaz de actuar con valentía para construir un plan alternativo al nacionalismo y no le pueda el miedo, el complejo y el bienquedismo". Si esos síntomas invaden a Arrimadas puede perder la batalla. No es fácil. Ya cayó derrotado en su dia UPyD, que se encontró sin aliados en ella, "pero nunca vendió sus principios". Será duro porque ·"décadas de adoctrinamiento y propaganda supremacista no se solucionan de un día para otro". El reto de Arrimadas, según Herzog, será que el Estado vuelva a Cataluña para "proteger los derechos de todos los catalanes pisoteados por unos gobernantes que se han saltado la ley". Es una batalla desigual que necesita la unidad de los constitucionalistas para vencer en una Tierra media catalana que debería volver a ser "abierta, tolerante, culta, y vanguardista, justo lo contrario del nacionalismo", afirma el exmiembro de UPyD.  

Con respecto a los resultados electorales, cree Terreros que el cansancio por los partidos tradicionales no es algo propio solo de España, porque está ocurriendo en otros países de Europa. El antiguo líder socialista también hace autocrítica, porque Arrimadas y su impulso no solo han dejado al PP convertido en un partido irrelevante en Cataluña,. es que el cinturón rojo de Barcelona se ha convertido en naranja, y el impulso Iceta se ha quedado en agua de borrajas. "Sí el socialismo catalán ha perdido posiciones y tendrá que reflexionar lo que decide hacer en el futuro, al igual que el PP". Oreja cree que Macron ya demostró que se puede acabar con la hegemonía de dos partidos y avisa a navegantes: "Aquí puede pasar lo mismo". Y mientras, Arrimadas llevará la carga del anillo. ¿Encontrará apoyos más allá de la Comunidad del Anillo? Frodo los tuvo cuando iba a tirar la toalla... y por eso triunfó

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