Tras más de 40 días de confinamiento

La curva que sí se aplana: los detenidos y las sanciones ya se ralentizan en un 30%

  • El máximo de arrestos por parte de todas las fuerzas policiales se dio el 11 de abril, Sábado Santo, con 232 casos en solo 24 horas. 
La curva que sí se aplana: los detenidos y las sanciones ya se ralentizan en un 30%
La curva que sí se aplana: los detenidos y las sanciones ya se ralentizan en un 30%
Nerea Bilbao

El pasado 11 de abril fue Sábado Santo y el que estaba destinado a ser el día grande para las vacaciones de Semana Santa de este año 2020 fue triste y con tormentas polares formándose desde el Atlántico. A partir del día siguiente, se desató una borrasca repentina sobre la península y los 30 millones de españoles confinados desde el 14 de marzo (según las estimaciones del Gobierno, una vez restadas las actividades esenciales) quizás se alegaron de que hiciera mal tiempo.

Pero, con todo, hubo 232 ciudadanos que no solo desafiaron al mal tiempo sino a las fuerzas de seguridad. Tal y como reflejan los datos diarios que proporciona el Ministerio del Interior sobre la actividad policial (Guardia Civil, Nacional, autonómicas y locales) de control de movimientos, aquel 11 de abril fue el día con mayor número de personas detenidas de los primeros 40 días del estado de alarma. También fue la jornada con mayor número de sanciones propuestas, con 26.263.

En 40 días de confinamiento, el rosario de situaciones rocambolescas en las que han tenido que actuar las fuerzas del orden han ido desde barbacoas familiares a partidos de fútbol, pasando por procesiones, peleas de gallos, paseos con peluches como si fueran un perro o caminatas a comprar al pan a kilómetros del domicilio particular. La anécdota escala al delito cuando ya se producen actos violentos y agresiones a los agentes de la autoridad. Desde el Ministerio, sin embargo, prefieren quedarse con el lado positivo desde el primer momento y constatan que "en su inmensa mayoría los ciudadanos están cumpliendo con las medidas con responsabilidad y solidaridad".

Tampoco se han parado a analizar de momento las cifras y su evolución, más allá del balance general que ofrecieron este sábado Policía Nacional y Guardia Civil, en la rueda de prensa habitual tras la reunión del Comité de expertos en la que parece que será la última con agentes uniformados. En ella, se dieron datos como que se han identificado a un total de 5.960.000 personas (290.000 en las fronteras) y a 510.000 vehículos.

Este balance llega a las seis semanas de confinamiento y cuando ya parece evidente que la particular cima de la curva de los desaprensivos e insolidarios (como se les suele llamar en esas ruedas de prensa oficiales) ha empezado su descenso y que tras una suave cuesta abajo en la siguiente semana a las fiestas, la pasada confirmó una caída de mayor velocidad y desde el lunes 20 acumula recortes en cuanto a arrestados y sanciones en el entorno del 30% respecto a los máximos.

En concreto, desde aquellas jornadas en torno a la Semana Santa en las que había más de 200 detenidos y alrededor de 25.000 sanciones al día se ha pasado a unos 150 arrestos y 15.000 propuestas de multa. Y no es que se hagan menos controles o se esté relajando el control policial sobre los ciudadanos. Aunque el número de identificaciones totales solo las da la Guardia Civil cada día (del resto de cuerpos se ignora este dato), el pasado jueves 23, por ejemplo, se paró a 132.000 personas y el 11 de abril de los récord fueron unas 91.000. Esto hace que el ratio de detenidos por identificación haya pasado del 6% en los días más complejos a menos de la mitad ahora. En general, y como explicó el portavoz de la Benemérita este sábado, el 94,8% de los ciudadanos a los que se les requirió explicaciones cumplía con la normativa.

Con todo, tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil han ido aprovechando a menudo sus intervenciones para recordar que, pese a que en estos días la prioridad es la lucha contra la pandemia y el control sobre el confinamiento, el resto de su actividad no se ha detenido. Como colofón en paralelo, en la rueda de prensa del adiós, cifraron ambas fuerzas de ámbito estatal en 70.900 las acciones 'sociales' que también han desempeñado.

Sobre la actividad concreta policial, en estas semanas se ha aprovechado para alertar sobre las estafas de todo tipo (en particular, las digitales), la lucha contra la violencia doméstica (con un 25% de más actividad en abril que el año pasado incluso), la batalla contra el narcotráfico (que entre el Guadalquivir y el Estrecho ha encontrado otras vías de intentar burlar a la justicia), las mafias internacionales (como la que creó una empresa supuestamente de transportes alimentarios para viajar hasta el centro de Europa con droga) o la prostitución (con redadas importantes en los últimos días).

Sin embargo, las decenas de miles de policías que vigilan calles y carreteras tienen como prioridad el estado de alarma (aunque al parar a un supuesto repartidor de pizza se descubra que está vendiendo droga). Eso les hizo estar especialmente atentos en los días en los que los españoles solían estar acostumbrados a salir más de sus casas: los festivos... y no es casualidad que los días de mayor actividad policial coincidieran casi exactamente con la Semana Santa al completo.

Antes, el 23 de marzo, fue el primer día que se proporcionarían resúmenes de las acciones de los distintos cuerpos implicados. Aquella vez se detuvo a 130 personas y se propusieron 21.341 actas de sanción. Durante el resto del mes las cifras se movieron entre ese suelo y las 150 de media (entre las 17.000 y las 20.000 sanciones).

Asimismo, desde el primer momento, fue la Policía Nacional el cuerpo con mayor número de arrestos (que en estado de alarma suelen ser por desobediencia grave a la autoridad o reincidencia… de ahí que los datos empezaran a darse una semana después del arranque del confinamiento). Aproximadamente, acaparan uno de cada dos detenidos del total. Muy cerca, pero siempre algo por debajo, se encuentran el conjunto de las policías locales, cuyos datos se ofrecen de forma unitaria.

Entre unos y otros, al llegar el 5 de abril, Domingo de Ramos, las detenciones superaron la barrera de los 200 y, tras dos días otra vez por debajo el Lunes y Martes Santo, volvió a rebasarla el Miércoles y permanecería sobre esos números hasta el 16 de abril (excepto el 9), cuando el retroceso cristalizó a la baja paulatinamente hasta las cifras actuales... que son muy similares a las primeras que se empezaron a dar hace ahora un mes.

En todo este tiempo, y pese a los incisos sobre todo tipo de delincuencia que se ha seguido controlando, la mayor preocupación policial en paralelo al control de los movimientos ha sido el ciberespacio. Más allá de lo que realmente quisiera decir el portavoz de la Guardia Civil hace una semana con la persecución de ciertos bulos, las fuerzas policiales se han volcado con todo tipo de amenazas que proceden de los nuevos usos de las tecnologías: estafas electrónicas, suplantaciones de identidad, falsas campañas de donativos... La lista de posibles riesgos ha cambiado de la calle a la pantalla de los ordenadores y móviles durante el confinamiento.

También una vez que pase el confinamiento y las medidas de control a la población y de sus movimientos podrán adaptarse todas las estadísticas a las cuentas habituales del Ministerio del Interior en cuanto a infracciones penales, detenidos y la tipología de los delitos cometidos. Por lo general, y según las cifras de los últimos años, en España se producían algo más de un millar de detenciones de todo tipo cada día de media (casi 400.000 en todo el año). Caso aparte merecen las sanciones: las 700.000 que se han propuesto triplican las que se impusieron durante todo el año de 2018 (último disponible) a cuenta del incumplimiento de la llamada como 'Ley Mordaza' (que es la que establece la desobediencia al agente como delito).

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