De la Vega, en el punto de mira de la prensa y la oposición por el cese de la directora del CIS

"De la Vega forzó a la ex presidenta del CIS a retrasar un sondeo político". Es el titular con el que El País se hacía eco este miércoles de la polémica en torno a la destitución de Belén Barreiro al frente de este organismo. Un día antes El Confidencial hacía saltar las alarmas al denunciar que la vicepresidenta "manipuló un sondeo del CIS para favorecer a Zapatero"y que por ello, decidió el cese de la ya ex directora del CIS. Un cese que va a dar mucho de qué hablar.Un día antes

Según la información aportada por ambos medios, Fernández de la Vega ordenó a la presidenta del CIS a realizar el trabajo de campo del barómetro de julio después del Debate sobre el Estado de la Nación en lugar de la primera semana del mes, como viene siendo habitual desde que el PSOE llegara al Gobierno. Barreiro se negó, lo que posteriormente provocó su cese. Precisamente, el CIS de julio fue el que dio la mayor ventaja al PP desde que Zapatero llegara a La Moncloa.

¿Por qué un medio afín al Gobierno denuncia las supuestas presiones de De la Vega a la directora del CIS? "Es la muestra de que todo esto huele mal y que el cese de Barreiro ha sentado muy mal a alguien", afirmaban a lainformacion.com fuentes parlamentarias.

Desde Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, defiende que esta polémica es la consecuencia de utilizar el CIS como "correa de transmisión del Gobierno", cuando debería ser un organismo científico independiente. "El talante no es todo lo que parece. En este Gobierno hay tics autoritarios que habría que arrinconar", añade el portavoz parlamentario de IU.

El PP ha pedido la comparecencia de De la Vega en el Congreso para que dé todos los detalles de lo ocurrido. Y en el PSOE cierran filas en torno a la vicepresidenta. Un diputado socialista aseguraba que los sondeos del CIS "siempre generan mucha tensión" entre el Gobierno y los responsables del organismo, mientras que otro se mostraba confiado en que todo este asunto "se quedará en los pasillos de Moncloa" y se olvidará.

Una polémica inoportuna

Pero como apuntan fuentes parlamentarias, este asunto llega en un momento complicado para De la Vega. Aunque por ahora se ha pospuesto un cambio de Gobierno, éste se espera para cuando finalice la negociación presupuestaria. Es decir, a partir de enero podrían volver las quinielas sobre quién se queda y quién se va. La marcha de la 'número dos' de Zapatero siempre ha estado ahí. Según unos, porque está cansada y, según otros, porque el presidente ya no confía tanto en ella. Además, los ministros Blanco y Rubalcaba suenan fuerte para ascender dentro del equipo de Zapatero. Si este asunto no se aclara y le sigue salpicando, podría debilitarse el peso de De la Vega.

Las mismas fuentes aseguran que De la Vega ha dado dos golpes en la mesa después de verano "para demostrar que sigue mandando". El primero, el cese de Belén Barreiro. Y el segundo, frenar en el Consejo de Ministros la decisión del Ministerio de Industria de ubicar en Zarra el almacén nuclear.

¿Consultó 'la vice' el cambio de fechas a la oposición?

La polémica ha generado una gran tensión este miércoles en el Congreso. La vicepresidenta primera ha negado en la sesión de control la información publicada. "Usted sabe que es una polémica estéril, por falsa, porque todo lo que aparece [en el artículo de El País] es mentira" ha respondido De la Vega a Soraya Sáez de Santamaría, la portavoz parlamentaria del PP, que ha utilizado una pregunta de la sesión de control relativa a otro asunto para denunciar la afición del Gobierno por el "cese de quien les dice a ustedes lo que no quiere escuchar".

A raíz del rifi-rafe entre ambas, en los pasillos del Congreso las partes implicadas organizaban diferentes corrillos para explicar a la prensa su versión sobre lo ocurrido. Fuentes de Vicepresidencia aseguran que se comunicó el cambio de fecha a todos los grupos políticos porque se consideraba que era más razonable realizar la encuesta del CIS del mes de julio después de un debate tan importante con el Debate sobre el Estado de la Nación. Y defienden que ningún grupo puso ningún problema.

PP e IU niegan que se les consultase

En cambio, desde el PP se niega que esta comunicación fuera una consulta. Según Sáenz de Santamaría, a ella le llamó el secretario de Estado de Asuntos Constitucionales, José Luis de Francisco, para comunicarles que el Gobierno había decidido modificar el calendario del sondeo, pero que no se negoció nada.

Gaspar Llamazares, portavoz de IU, ha coincidido con la portavoz del PP en que sólo recibió una llamada para comunicarle que se iba a efectuar el cambio de fechas del CIS, pero no para conocer su opinión. "Me lo dieron hecho", añade.

Desde ERC y CiU confirman que se les llamo para consultarles el cambio, pero que no hubo negociación.