La primera jornada del debate de investidura ya tiene una curiosa anécdota, protagonizada por ERC. Los catorce diputados del partido republicano han llegado al Congreso portando flores amarillas, que han depositado en la parte frontal de sus escaños o en las solapas de sus chaquetas, ya en una vez dentro del hemiciclo. Una clara referencia a los presos independentistas.
Su portavoz, Gabriel Rufián, ha indicado que llevaban esas flores "en recuerdo de que hay gente injustamente en la cárcel y en el exilio por ser demócratas". Es decir, un 'homenaje' al ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, que está en el exilio, y a Oriol Junqueras y el resto de consellers que están en prisión.
Respecto a las negociaciones entre el PSOE y Unidas Podemos, Rufián ha indicado que el dialogo es positivo y sobre todo que durante el fin de semana haya habido "discreción y negociaciones", en vez de "titulares, amenazas o tuits".
Por el momento, las reuniones entre ambos partidos prosiguen con el objetivo de llegar a un acuerdo de gobierno antes de la fecha límite, que es el jueves, en la segunda votación del debate de investidura. De no lograrlo, tienen una tregua de dos meses más antes de que se convoquen de nuevo elecciones.
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