Ana mientras buscaba a Gabriel: “Nadie le puede hacer daño, es un angelito”

“Nadie le puede hacer daño, es un angelito”. “Tú si ves un desconocido corre, no te pares”. “Lo importante es que aparezca el niño”. “La camiseta nos da una esperanza de encontrarlo con vida y de que esté bien”. Son declaraciones de Ana Julia Quezada Cruz, presunta asesina del pequeño Gabriel que desapareció el pasado 27 de febrero y cuyo cuerpo ha sido encontrado en el maletero de su coche. Durante 13 días la pareja sentimental del padre del pequeño ha guardado el secreto mientras lloraba su ausencia, consolaba a sus padres y participaba en las búsquedas.

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Aunque en un segundo plano mediático, son varias las intervenciones que ha ido haciendo en diferentes medios. "Nos dicen que comamos, que durmamos, pero es imposible, si no es con medicamento no podemos dormir", aseguraba a un periodista de ‘Expediente Marlasca’ que anoche centró su atención en la noticia que conmocionó a España desde las dos de la tarde, momento en el que la Guardia Civil siguió a Ana hasta una finca donde cogió unas mantas.   

Cuando se disponía a entrar en el garaje de su vivienda donde reside con el padre del pequeño dos coches interceptaron el suyo. “Yo no he sido. He cogido el coche esta mañana”, decía mientras algunos de los agentes rompían a llorar de impotencia porque lo tenían todo grabado.

Cuando apareció la camiseta de Gabriel la investigación dio un giro y Ana empezó a estar en el centro de la investigación. Ella llegó a decir con tono socarrón a una periodista de ‘Vive la vida’ “yo ahora tengo la culpa de todo”. Eso lo dijo un día antes de ser detenida.

Hace días la Guardia Civil la puso en el foco como sospechosa por sus contradicciones y vagas explicaciones sobre el móvil -no lo entregó porque dijo que lo había perdido -o lo que hacía en el momento de la desaparición de Gabriel. 

Ana apareció en escena mediática el segundo día de la desaparición y desde ese momento ha estado muy pendiente de las explicaciones de la Guardia Civil sobre el caso. Llega a declarar en dos ocasiones y es ahí donde la Guardia Civil le llega a desvelar que una cámara habría recogido la matrícula de un coche. Pudo ser el detonante que hiciera que Ana aprovechara que su pareja iba a una reunión para ella ausentarse de la cita y dirigirse a una finca donde, seguida por la Guardia Civil, sacó a Gabriel de un pozo.

Al ser preguntada por lo extraño de que en una zona donde ya se habían hecho búsquedas fuera ella la que encontró la camiseta no da una respuesta clara: "Es extraño pero nos da igual. Lo importante es que aparezca Gabriel. Lo hayamos encontrado nosotros, cualquiera, eso nos da igual. Eso nos da una esperanza. Eso nos da una esperanza de encontrar a Gabriel con vida, que esté bien”. Y el padre, que paseaba junto a ella sentencia: “para nosotros es una buena noticia. Nadie se va a molestar si el niño no está bien ya en ir a poner algo por ahí”.