Delgado deja el homenaje en Mauthausen al citar la Generalitat a "presos políticos"

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La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha abandonado este domingo un homenaje de la Generalitat a los deportados republicanos durante el nazismo en protesta porque el Gobierno catalán los usó para recordar a "los presos políticos" en prisión por organizar el referéndum ilegal.

Delgado visita este fin de semana los antiguos campos de exterminio de Gusen y Mauthausen, en Austria, en homenaje a las víctimas del régimen de Hitler, coincidiendo con la conmemoración de la liberación de Mauthausen por las tropas aliadas en 1945.

Según recordaba el Ministerio de Justicia, estos exiliados españoles estaban "desprovistos de su nacionalidad por decisión del gobierno franquista, padecieron innumerables atrocidades y un total de 5.117 fallecieron allí y en otros campos de concentración nazis".

Este reconocimiento, fijando la fecha del 5 de mayo, y los actos de memoria en Austria suponen el primer homenaje institucional del Estado español a las víctimas de la barbarie nazi. Por ello, la ministra, que participa en los actos de recuerdo a la más de 8.000 víctimas españolas del nazismo, abandonó el acto cuando la directora general de Memoria Democrática de la Generalitat, Gemma Domènech, calificó de "presos políticos" a los miembros del Gobierno catalán en prisión preventiva.

Domènech hizo esta referencia al recordar que la placa de homenaje fue colocada hace dos años por el entonces consejero de Asuntos Exteriores de la Generalitat de Catalunya, Raül Romeva, uno de los ex miembros del Gobierno catalán en prisión preventiva acusados de distintos delitos en relación a la organización de la consulta en 2017.

La ministra depositó pocos minutos después un ramo de flores ante otra placa de recuerdo a los españoles que fallecieron en Mauthausen. "Esto es por todos los españoles", dijo Delgado, que regresó luego a la placa de la Generalitat para depositar un ramo de flores.

Una esquela del Gobierno

Varios diarios españoles publican este domingo una esquela con la que el Gobierno rinde homenaje a los 10.000 españoles deportados y fallecidos en Mauthausen (Austria) y otros campos de concentración nazis.

"Mauthausen y otros campos de concentración nazis. 10.000 españoles deportados. Más de 5.000 españoles fallecidos. In memoriam" es el mensaje elegido por el Gobierno y el Ministerio de Justicia para este recuerdo a las víctimas del nazismo.

La publicación de la esquela coincide con la conmemoración este domingo, por primera vez en España, del 5 de mayo como "Día de homenaje a los españoles deportados y fallecidos en campos de concentración y a todas las víctimas españolas del nazismo".

Un decisión que fue adoptada el pasado 26 de abril por el Consejo de Ministros a instancias de la ministra de Justicia, Dolores Delgado. Según el Ejecutivo, en Mauthausen estuvieron internados 7.500 españoles, en su mayoría exiliados republicanos que abandonaron el país al final de la Guerra Civil.

Colaboración del franquismo con crímenes nazis

Por otra parte, la ministra de Justicia acusó a la dictadura del general Francisco Franco de haber colaborado en la deportación a campos de exterminio nazis de miles de españoles tras la Guerra Civil (1936-1939) y que el Holocausto fue también "una vergüenza" del régimen franquista.

Delgado recordó que en septiembre de 1940 Ramón Serrano Suñer, entonces ministro de Gobernación de Franco, mantuvo una reunión con la cúpula nazi, tras la que se dictó la orden de deportación de republicanos españoles a los campos nazis. Una orden, indicó la ministra, para que esos españoles "fueran exterminados".

De hecho, los primeros españoles que llegaron a Mauthausen fue un grupo de exiliados que vivía en la Francia ocupada por la Alemania nazi. "Esto quiere decir que Franco no fue un observador pasivo de lo que sucedía en los campos de exterminio, sino que se dio la orden para que el régimen nazi terminase con la vida de los españoles, de nuestros compatriotas demócratas", denunció.

Delgado señaló que los prisioneros republicanos en Mauthausen, llamado el "campo de los españoles", estaban identificados con un triángulo azul y una letra S que los señalaba como "apátridas españoles". La ministra se mostró "orgullosa" de referirse a ellos como "compatriotas" y reivindicó que "los asesinados por el horror nazi eran republicanos antifascistas y luchadores de la democracia y la libertad".

"Hemos tenido una memoria muy selectiva y una escasa memoria, primero con el golpe militar, después con la Guerra Civil y después con la dictadura, y sobre todo con el exilio, que es el gran olvidado", declaró la ministra a los medios.