La derrota del PP en las elecciones generales del 28-A ha supuesto un auténtico terremoto en la Comunidad de Madrid. La lista que encabezaba su líder, Pablo Casado, se ha tenido que conformar con siete escaños, frente a los 15 que obtuvo en los comicios de 2016. Una catástrofe en toda regla al margen de todas las previsiones de la formación de Génova.
Prueba de ello es que se han quedado fuera los hasta ahora diputados José Ignacio Echániz y María del Mar Blanco, al tiempo que tampoco han conseguido acta ni Francisco Javier Fernández-Lasquetty ni Carlos Aragonés ni Miguel Abellán.
El caso de Lasquetty prueba que el PP no contaba con semejante descalabro en su lista madrileña, ya que el político, muy vinculado al expresidente del Gobierno José María Aznar y a los ejecutivos de la expresidenta regional Esperanza Aguirre, era un refuerzo de Casado para apuntalar la legislatura que ahora se abre en el Congreso de los Diputados.
Solo siete populares han pasado el corte en la lista por Madrid: el propio Casado; Adolfo Suárez Illana, hijo del expresidente Adolfo Suárez; la periodista Edurne Uriarte; el economista Daniel Lacalle; Ana María Beltrán; la catalana Andrea Levy; y el alcalde de Boadilla del Monte, Antonio Pablo González Terol.
El pinchazo del PP en su lista madrileña estaría directamente relacionado con la irrupción de Vox y el crecimiento de Ciudadanos. Vox cosecha cinco actas, entre ellas las de su líder, Santiago Abascal; también serán diputados el abogado Javier Ortega Smith, Iván Espinosa de los Monteros, María de la Cabeza Ruiz y Carla Toscano.
Por su parte, la lista que encabezaba Albert Rivera obtiene ocho diputados, frente a los seis de los anteriores comicios.
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