Un conductor kamikaze de 58 años ha sido detenido esta madrugada en la A-62, en Valladolid, después de que recorriera ocho kilómetros en sentido contrario, en un momento con densa niebla, y ha tenido que ser reducido ya que no respondió al alto y las luces dadas por una patrulla de la policía municipal.
El hombre está detenido e ingresado bajo custodia en un hospital de Valladolid por el estado que presentaba, que en principio no se debe al consumo de alcohol o drogas sino a otras circunstancias, según han explicado a Efe fuentes de la Guardia Civil.
Fuentes de la Policía Local han detallado que en torno a las 0.50 horas una patrulla ha accedido a la A-62, desde la VA-30, tras ser avisada por la Guardia Civil de que había un conductor conduciendo en sentido contrario. Los agentes de la policía municipal se han puesto de frente al conductor, le han dado el alto y las luces, sin conseguir respuesta alguna, por lo que le han tenido que perseguirle y cruzarse en la A-62 para poderlo parar.
Al darle el alto, el conductor se ha puesto muy agresivo y le han tenido que reducir y apartarle de la calzada, para que no fuera atropellado, y finalmente ha sido detenido por la Guardia Civil. Se le atribuyen delitos contra la seguridad en el tráfico, desobediencia y atentando a la autoridad, tanto a la policía local como a la Guardia Civil.
El hombre fue avistado en la A-62 a la altura de la Overuela, en el kilómetro 118, conduciendo en sentido contrario, y consiguieron detenerlo a la altura de la zona del Estadio de fútbol, en el kilómetro 126. Fuentes policiales han incidido en la densa niebla que había en el momento del suceso, con lo que eso podía haber supuesto en la seguridad viaria.
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