Detenido por amenazas de bomba el hombre que interrumpió el telediario de tve


La Policía Nacional detuvo este miércoles en Santiago de Compostela al hombre que el pasado 2 de abril irrumpió en el plató del telediario de las nueve de TVE. El arrestado, además de esta acción, es responsable de decenas de amenazas de bomba en lugares emblemáticos como el Museo del Prado o la Alhambra.
Según informó la Policía, el espontáneo -C.D.F., de 39 años y vecino de Madrid-, realizaba llamadas a edificios significados y avisaba de la falsa colocación de artefactos explosivos. Entre los objetivos de sus llamadas estuvieron el Museo del Prado, la Sagrada Familia y la Alhambra.
Estos avisos motivaron desalojos de catedrales, museos o medios de comunicación tras la intervención de los Técnicos en Desactivación de Explosivos. En todos los casos, tras la inspección policial, el resultado fue negativo.
El detenido comenzó el pasado 31 de marzo a realizar todas estas llamadas. Sus últimos avisos de la colocación de artefactos fueron efectuados justo el día antes de su arresto y sus objetivos fueron el aeropuerto de Santiago y en el Rectorado de la Universidad.
GRAN ALARMA
Estas comunicaciones de falsas bombas produjeron gran alarma social, ya que se tuvo que desalojar edificios de gran afluencia de ciudadanos, como las catedrales de León, Santiago de Compostela o Palma de Mallorca, así como la Sagrada Familia de Barcelona y la Mezquita de Córdoba. También telefoneó a la Alhambra de Granada, el Museo del Prado y la Ciudad de las Artes en Valencia.
Además, el detenido también avisó de la falsa colocación de artefactos explosivos en centros de trabajo de varios medios de comunicación de Madrid, Málaga, Burgos, La Coruña, Valencia, Barcelona, Sevilla, Gran Canaria, Valladolid, Toledo, Alicante y Santiago de Compostela.
Este tipo de hechos están encuadrados en el artículo 561 del Código Penal, que castiga con penas de pena de prisión de seis meses a un año o multa de 12 a 24 meses, -según la alarma o alteración del orden efectivamente producida-.
En concreto, la ley castiga al que con ánimo de atentar contra la paz pública, afirme falsamente la existencia de aparatos explosivos u otros que puedan causar el mismo efecto, o de sustancias químicas, biológicas o tóxicas que puedan causar daño a la salud.

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