Una de las herramientas más importantes de las unidades de élite de la Guardia Civil, como la Unidad Central Operativa (UCO), es su sistema de escuchas telefónicas. Se llama Egobox y los agentes lo utilizan para, previa autorización judicial, poder conocer los movimientos de las personas y organizaciones a las que persiguen. Este software fue clave para poder solucionar casos de gran complejidad, como el asesinato de Diana Quer, después de que el instituto armado pudiera 'pinchar' las conversaciones del principal acusado, Enrique Abuín. También fueron trascendentes en el referéndum independentista del 1 de octubre.
Egobox es considerada la 'niña bonita' de la UCO. Un agente de la Benemérita habla de esta herramienta tecnológica como uno de los recursos más importantes que tienen a su disposición en su trabajo diario. También lo emplea el Servicio de Información para poder escuchar las conversaciones de terroristas o narcotraficantes y la jefatura de Asuntos Internos para cuestiones relacionadas con el cuerpo.
El problema con el que se ha encontrado la Guardia Civil es que, según ellos mismos reconocen, se ha experimentado en los últimos meses un notable incremento de las órdenes judiciales para la ejecución de escuchas telefónicas, lo que les ha llevado a impulsar el sistema Egobox y mejorarlo. Cada vez hay, en definitiva, más teléfonos que intervenir y los guardias civiles necesitan nuevos medios técnicos y con un mayor nivel de sofisticación para completar sus pesquisas. Este dispositivo, por cierto, también sirvió a los investigadores para destapar la trama Lezo en la que se encuentra implicado el expresidente madrileño Ignacio González.
El Ministerio del Interior acaba de dar el visto bueno a la inversión de 71.874 euros para el mantenimiento de Egobox durante el próximo año y, además, para adquirir nuevos equipos de sonorización. En concreto, la Guardia Civil va a incrementar su dotación con seis nuevos dispositivos con GPS, tres más de repuesto para el caso de que se averíen los que normalmente se utilizan y, por último, tres nuevos micrófonos remotos que se utilizarán para operaciones de complejidad añadida. Se trata, en definitiva, de mejorar los medios técnicos con los que los guardias civiles pueden obtener pruebas sonoras para los casos que investigan.
La compañía elegida por la Guardia Civil para prestar este servicio ha sido Fortier Europe, una empresa con sede social en Boadilla del Monte, Madrid, que se ha hecho con el contrato bajo un procedimiento negociado sin publicidad. Tres especialistas de la Benemérita han valorado la idoneidad de esta firma para ser la elegida: un capitán del Servicio de Criminalística, un cabo primero del Servicio de Contratación y un agente de la misma unidad. La de Fortier, por cierto, fue la única oferta que se presentó ya que es la firma que conoce cómo mejorar y perfeccionar este sistema que ellos mismos desarrollaron.
Hay que recordar que las unidades de investigación de la Guardia Civil cuentan desde hace un año con un dron táctico que les permite realizar grabaciones durante sus investigaciones sin ser detectados. El cuerpo lo compró a la empresa Paukner por 67.245 euros y gracias a esta diminuta aeronave no tripulada los agentes de la UCO o del Servicio de Información han podido documentar importantes investigaciones aportando grabaciones de "muy alta calidad" y tomadas a gran distancia.
Egobox funciona de forma paralela a Sitel (Sistema de Interceptación Telefónica), el sistema de escuchas telefónicas que utiliza la Policía Nacional y sus unidades especializadas, como la famosa UDEF. Sitel es un dispositivo que graba todas las conversaciones que se ordenan previa autorización judicial y que las almacena en un disco duro. Todo está encriptado, de forma que solo se puede acceder a Sitel a través de una clave personal y, por tanto, no se pueden manipular las grabaciones. Estos dos sistemas de escuchas telefónicas, Egobox para la Guardia Civil y Sitel para la Policía, conviven de forma autónoma: los cuerpos no comparten sus investigaciones ni bases de datos. Interior también está ensayando con un nuevo sistema llamado Verint que actualmente sigue en fase de pruebas, según indican fuentes policiales.
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