Villarreal (Castellón).- Diego López, portero del Villarreal, aseguró que la destitución de Ernesto Valverde como entrenador del equipo "ha sido un golpe duro para el vestuario" y que están "dolidos por ello".
El guardameta explicó que en estas situaciones son igual de culpables los futbolistas que el entrenador. "Cuando pasa esto es algo que afecta a todos los que formamos parte del equipo. La verdad es que el técnico lo ha intentado, pero las cosas no han salido como esperábamos", indicó.
Cuestionado por los motivos de la irregular trayectoria del equipo, López apuntó que "desde el primer momento las cosas no fueron bien".
"Hemos trabajado mucho pero el equipo nunca ha llegado a encontrarse bien. Hay mucho que mejorar y lo primero es nuestro rendimiento", destacó.
Respecto a la llegada del técnico del filial Juan Carlos Garrido al primer equipo, el futbolista señaló que "lo lógico es que sea la gente del club la que se haga cargo de la situación".
"El nuevo entrenador nos ha pedido ambición y nos ha transmitido las ganas que él tiene de sacar adelante esta situación", agregó.
El meta gallego acudió hoy a la ciudad deportiva, pese al día de descanso, ya que arrastra una bursitis en la rodilla que le impide "estar del todo bien", aunque en principio no peligra su concurso para el partido de Mallorca de la próxima jornada.
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