Cuidado con bordarlo en Halloween: un disfraz muy real podría llevar a la cárcel

  • Determinados disfraces y actitudes, como representar un falso asesinato en plena calle, podrían suponer delitos como el de desórdenes públicos.
Estos 7 personajes morirán antes de que termine The Walking Dead
Estos 7 personajes morirán antes de que termine The Walking Dead

Se acerca el 31 de octubre, Halloween, una fecha en la que los disfraces de todo tipo son una tradición cada vez más instaurada en nuestro país. Niños y adultos por igual, los españoles se toman cada vez más en serio la elección de disfraz para este día. Pero ¿qué pasa si vamos demasiado  lejos?  Aunque se quiera l dejar a todos boquiabiertos, debemos tener cuidado de, según qué disfraz se elija, no meternos tanto en nuestro terrorífico papel que podamos cometer un delito que nos agüe la fiesta o a los de nuestro alrededor.

De acuerdo con el Código Penal, son varias las penas y sanciones a las que nos podemos enfrentar por culpa de un disfraz o una actitud desafortunada. Desde Legálitas advierten de que todo Halloween invita a "dar sustos", sin embargo, "ir demasiado lejos fingiendo en público una situación de peligro demasiado realista (un asesinato en plena calle o una invasión zombie) puede ser constitutivo de delito".

Y ponen un ejemplo. Si el disfraz es de asesino loco "y simulamos que vamos a provocar un incendio o que vamos a ponernos a atacar a otras personas con una sierra mecánica, debemos tener cuidado con dejar claro que es una actuación, ya que el hecho de simular en un sitio público una situación de peligro para la comunidad supondrá la comisión de un delito recogido en el artículo 561 del Código Penal y nos enfrentaremos a una pena de hasta un año de prisión, y una multa, si como consecuencia de la broma se produce una asistencia o salvamento como que acuda la policía o el Samur".

Conductas similares de simulación de peligro con consecuencias  parecidas se han producido: en 2016 cinco jóvenes fueron detenidos por irrumpir en un cine en Fuenlabrada fingiendo un ataque terrorista. El bufete también pone de ejemplo las bromas macabras de los payasos diabólicos que solo perseguían incrementar sus visitas en Youtube. "El hecho de que estemos en Halloween no hará que esas conductas, cuando se hagan en la misma forma, queden impunes", insisten.

Querer provocar el caos o infundir miedo en la población puede constituir un delito de amenazas, que se castiga con una multa, cuando la amenaza sea leve, y con pena de prisión si va dirigida a los habitantes de una población, grupo étnico, cultural o religioso, de diferentes meses o varios años, según la gravedad de las amenazas y las circunstancias.

Asimismo, según el Reglamento de Armas debemos tener en cuenta que todo lo que pueda pasar por un arma real, como puede pasar al ir disfrazado de “sheriff zombi” o de atracador de bancos, puede llevar a confusión y, por lo tanto, te la podrán requisar.

No hay problema si está claro que el arma es de juguete y forma parte de un disfraz, pero sí lo hay si la imitación es tan buena que parece un arma real. Por otro lado también aseguran que hay que tener cuidado si nuestra actitud nos llevan a hacernos pasar por una autoridad pública, ya que podría ser delito de usurpación de funciones públicas y de intrusismo.

Esto sería el caso, por ejemplo, de ir disfrazado de policía y actuar como tal de forma que se lo hagamos creer a los demás. La pena de prisión de este delito iría desde uno a tres años.

¿Significa esto que hay personajes prohibidos como disfraz de Halloween? Desde Legalitas aseguran que es totalmente legal disfrazarse de zombi, policía, atracador, payaso diabólico o villano maligno, siempre que "en ningún caso se haga creer a los demás que lo somos de verdad ni provoquemos perjuicios o situaciones de pánico".

Mostrar comentarios