La ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, ha abogado este viernes por establecer un tipo penal para todo el mundo contra delitos medioambientales e instaurar un tribunal internacional que persiga a los responsables de estas acciones contra los ecosistemas. Delgado ha defendido que la comunidad internacional disponga de medios legales para combatir los "ecocidios" al igual que ya existen instrumentos similares para perseguir crímenes como el genocidio, la corrupción y el tráfico de armas y de drogas.
"Si hemos aceptado que la solución a las más graves violaciones de derechos humanos no puede quedar a expensas de la voluntad o eficacia de un determinado sistema de un país, los atentados más graves contra los ecosistemas han dejado de ser algo nacional, nos trasciende, es internacional. Lo que pasa en un país tiene efecto en otros países", ha reflexionado la ministra. Delgado ha intervenido en una mesa redonda celebrada en la cumbre del clima de Madrid (COP25) en la que han participado varios fiscales en materia medioambiental.
Según la titular de Justicia, es preciso "internacionalizar la defensa de los ecosistemas" y que formen parte de los tratados internacionales para disponer de "instrumentos similares a los utilizados en la persecución de otros grandes crímenes", al estilo de lo que ha representado la Corte Penal Internacional (CPI). "Necesitamos la misma respuesta cuando queremos defender nuestro planeta. Es imposible afrontar la lucha contra esa amenaza si no hay acciones internacionales concertadas", ha insistido.
La protección del ecosistema, ha añadido Delgado, es "una tarea global que necesita la tutela efectiva de los Estados y de los tribunales y jurisdicciones estatales" y de una respuesta internacional "efectiva y apropiada". La ministra ha recordado que la Fiscalía del CPI anunció en 2016 su intención de tener en cuenta los impactos sociales, económicos y medioambientales a la hora de analizar la gravedad de un determinado crimen.
Esta iniciativa representa, en su opinión, un punto de inicio a estos graves crímenes causantes de daños en la naturaleza y alimenta la esperanza para establecer medidas "vinculantes y coercitivas". La ministra ha animado a los jóvenes a que se sigan promoviendo movilizaciones y protestas para pedir a los gobiernos que combatan la crisis climática al ser los más afectados por esta amenaza.
"Es importante que lideren los movimientos para reclamar respuestas de los poderes públicos. Estas movilizaciones son justas porque reclaman un medio ambiente limpio, saludable y sostenible", ha afirmado.
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