Dos empresarios reconocen que optaron al concurso para las urnas del 1-O

Los dos empresarios que optaron al concurso para licitar urnas para el referéndum del 1 de octubre, en un proceso convocado por la Generalitat que acabó declarado desierto, han reconocido hoy ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) su participación en este trámite administrativo.

Los dos empresarios, de las compañías Plastic Express y de la UTE Espai Wordl y Suministros Integrales Futbida, han comparecido hoy como testigos ante la magistrada del TSJC Mercedes Armas, que investiga al gobierno catalán por la celebración del referéndum del 1-O, que estaba suspendido por el Tribunal Constitucional.

Según han informado fuentes judiciales, durante el interrogatorio, que se ha centrado especialmente en los aspectos técnicos del concurso, los empresarios han destacado su experiencia en la fabricación de urnas y han reconocido que optaran al concurso, aunque la Generalitat lo acabó declarando desierto y compró las urnas que se usaron el 1-O a través de un sistema que todavía no ha aclarado.

Tras la comparecencia de estos dos testigos, en una sesión que hoy ha sido muy técnica, la magistrada tiene previsto interrogar la próxima semana como testigos a varios cargos de la Generalitat, entre ellos Meritxell Carbó, secretaria general del Departamento de Gobernación; Carles Sala, secretario de Vivienda, y Joaquim Ferrer, secretario de Administraciones Locales.

También han sido citados Xavier Uriós, abogado jefe del Departamento de Gobernación y director general de Asuntos Contenciosos; Montserrat Bonastre, de la Intervención General; y Esther Obach, secretaria de Función Pública.