Moncloa ya mira al tercer trimestre

La cuarta ola y el retraso de las ayudas directas amenazan los planes de Calviño

El Gobierno fía la recuperación económica a la llegada masiva de vacunas. Abril es bautizado internamente como "el mes de las vacunas". Algún ministro asegura que en julio se cumpliría la promesa del 70%.

calviño sánchez
La cuarta ola y el retraso de las ayudas directas amenazan los planes de Calviño
EFE

El Gobierno asume que se está atravesando un momento crítico para la recuperación económica. El avance del virus alarma en la cúpula del Ejecutivo donde concluyen que "si hay cuarta ola no hay economía". Los datos apuntan a que esa temida cuarta ola ya está aquí; de hecho las cifras de este lunes reflejan un incremento progresivo de los contagios y una mayor presión hospitalaria en algunas autonomías como consecuencia del puente de San José. De hecho desde el Ministerio de Sanidad ya se empieza a difundir el mensaje de que la situación es "preocupante". En el Ministerio de Economía se confía en la estacionalidad de la economía española y se está preparando el terreno para arrancar con fuerza la campaña de verano. Pero en este momento la incertidumbre amenaza todos los planes.

España cerrará marzo con más de 5.000 fallecidos y una incidencia acumulada en aumento. Las escenas de los últimos días en las calles -situación que el candidato del PSOE a la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, ha definido como "desmadre-, y las festividades de Semana Santa implican que los informes de previsiones que maneje el Ministerio de Sanidad no sean precisamente optimistas. Por eso el objetivo del Gobierno central pasa por reducir la duración de esta previsible cuarta ola. La tercera, la de Navidad, costó dos meses en doblegarse y eso es lo que se quiere evitar de cara a una etapa del año en la que el turismo y la hostelería debería empezar a recuperarse con fuerza. Es su temporada alta.

Para la economía, además, no es lo mismo arrancar los meses de abril, mayo y junio con restricciones menos severas que tener que ejecutar decisiones más drásticas o aplicar un toque de queda más temprano, como ya se puso sobre la mesa la pasada semana en el Consejo Interterritorial de Salud. En Sanidad, de hecho, ya se está contemplando proponer un endurecimiento de las medidas para la vuelta de estos días festivos. "La transmisión sólo se controla reduciendo la movilidad", repiten en el equipo de Carolina Darias.

Calviño y Moncloa lo fían todo a la vacunación, una campaña que está yendo más lenta de lo que esperaban. Abril es para ellos "el mes de las vacunas"

En el equipo de Calviño, desde donde se monitorizan cada día los registros económicos, y en Moncloa lo fían todo a la vacunación, una campaña que está yendo más lenta de lo que esperaban, según admiten. Pensaban que marzo iba a ser un mes importante para inocular dosis pero ahora la esperanza está puesta en abril. Han bautizado el próximo como "el mes de las vacunas" y creen que será el momento de adquirir la "velocidad de crucero" con la inoculación. La llegada de las monodosis de Janssen, a partir del 19 de abril, representa la gran esperanza del Gobierno. De hecho, en Sanidad se confía que esa vacuna, sumada a las ya disponibles de Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca, y siempre y cuando las farmacéuticas cumplan con sus compromisos contractuales, tendrán su efecto inmediato en la economía. "Será un escenario diferente", destacan.

El Ejecutivo de Sánchez mantiene la promesa de tener vacunada al 70% de la población durante el verano. Ese momento puede llegar en junio o en septiembre. Pero un ministro del área económica comenta en privado que si todo marcha como está previsto ese compromiso se cumplirá en julio. Y es ahí cuando España se la juega económicamente, según admiten diferentes fuentes del área económica del Gobierno. La incertidumbre que se refleja sobre el segundo trimestre, por tanto, aún es elevada en este momento. 

El Gobierno mantiene la promesa de tener vacunada al 70% de la población en verano. Un ministro del área económica comenta en privado será en julio

Las cifras que aporta Sanidad a medio y largo plazo son estas: en abril se va a multiplicar por tres la llegada de vacunas. De hecho, durante la segunda quincena de ese mes se recibirán unas 300.000 dosis sólo de Janssen, unas 1,3 millones en mayo y unas 3,9 millones en junio. "Es decir, que en un trimestre solo con Janssen serían vacunados cinco millones y medio de españoles", recordó Darias este fin de semana. 

Restan, con estos planes, semanas y meses de restricciones en España, que podrían ir a más, y las ayudas directas por 7.000 millones a pymes y autónomos que aprobó el Consejo de Ministros hace ahora tres semanas no va a llegar de forma inmediata. El plan sigue generando dudas entre los empresarios y también a nivel interno en el Gobierno. De hecho, fue Moncloa quien urgió a Economía a acelerar su aprobación y ahora el dilema se encuentra en saber si esas transferencias serán rápidas o se dilatarán en el tiempo. Aprovechar el ciclo económico y acompañar a las empresas en este momento es clave, apuntan las fuentes consultadas, de forma que el desbloqueo de los fondos a las autonomías no debería demorarse.

Entre los sectores del Gobierno partidarios de acelerar las ayudas directas y una parte del empresariado no pueden evitar mirar de reojo a Italia y a las medidas económicas que ha puesto sobre la mesa primer ministro Mario Draghi. El plan del expresidente del BCE se concreta en un desembolso de 32.000 millones con un paquete especial de 11.000 millones a fondo perdido para ayudar a empresas y autónomos afectados por la pandemia. El tecnócrata habló de "una respuesta contundente contra la pobreza". "Sé que es una respuesta parcial, pero es lo máximo que podíamos hacer; llegarán nuevas medidas", añadió. 

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