El asalto a la Casa Blanca obliga a multiplicar las medidas de seguridad

    • La labor del Servicio Secreto ha sido cuestinada, los controles son más estrictos y tres furgonetas protegen el área por la que entró el intruso.
    • Muchos de los que estuvieron encargados de la seguridad de la Casa Blanca han dejado su puesto y ahora se han encargado estudios para saber si se necesita o no más personal.
Telefonazos desde el Despacho Oval
Telefonazos desde el Despacho Oval
María Torrens Tillack | Fotos: Pete Souza, Casa Blanca

Elasalto ala Casa Blancaha dejado en muy mal lugar alServicioSecreto de Estados Unidos. Ha sido la primera vez que un intruso entra en el edificio presidencial, con un vehículo cargado de gran cantidad munición, poniendo en riesgo la vida de Barack Obama y su entorno.

Pese a que en el momento del asalto el presidente y su familia estaban en la residencia de Camp David en Maryland, la situación ha generado auténtica preocupación.

Por esta razón, el Servicio Secreto, claramente cuestionado, ya que es el responsable de la seguridad del presidente, se ha visto obligado a aumentar la vigilancia alrededor de la Casa Blanca, indicó el portavoz presidencial, Josh Earnest.

No es infrecuente que los agentes tengan que detener, de vez en cuando, a personas que saltan la valla que protege a la Casa Blanca, en el 1.600 de la avenida Pensilvania, pero sí que un intruso pueda acceder a su interior.

La gente enWashington ha dado consejospara aquellosque custodiaban laCasa Blanca. Unex oficialdel Servicio Secreto quepidió no seridentificado -"yosoy una personaprivada",dice-asegura estar desconcertadocomo cualquierade susantiguos colegas.

Aseguraque ha pasado"muchashoras"de pieen la puertade la fachada norte, por donde entró el intruso, que logró avanzar hasta 60 metros, y se preguntacómoOmar González, el veterano de la guerra de Irak responsable del asalto, llegó tan lejos.

Gonzálezfue capturadouna vez que llegóal interior.Tenía un cuchilloy 800balas. Por suertenadiesalió herido.Aún así, laviolación de la seguridadha marcado una nueva preocupación y un nuevo para los servicios de inteligencia.

Según informa BBC News en su página web, la seguridad se hareforzado desde el incidente. Tres camionetasblancasestaban estacionados el lunes cerca de la puerta de la fachada.Además, los visitantesfueron examinadoscon más cuidadoque de costumbre.Algunosfueron rechazados.

Elincidente vuelve poner en evidencia al Servicio Secreto estadounidense, que en los últimosaños se hanvisto involucradoen una serie deescándalos sexualesy asuntos relacionados con el alcohol y las drogas.

Enlos últimos años,los que trabajanen el Departamentode Seguridad Interna, que supervisagran parte delservicio secreto,hansufrido deuna alta tasa deabandonos.

Una revisión internadelServicio Secretoestá en marcha.Larevisión incluiráuna evaluaciónacerca de si se necesitao no más personal.

Ahora la cuestión es equilibrar la evidente necesidad de seguridad en un lugar muy visitado con la necesidad de no abrumar a los visitantes y que la entrada a la Casa Blanca -la casa del pueblo- no se vea como una fortaleza inaccesible.

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