El ayuntamiento de Valencia ha ordenado adecuar las salas del tanatorio y crematorio municipal para convertirlos en "espacios neutros", sin significación religiosa. En dichas estancias hay actualmente un crucifijo y una imagen de la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia, que en próximas fechas no estarán a la vista del público.
Así se ha transmitido a las empresas concesionarias del cementerio de la ciudad: "No se han dado instrucciones concretas, sino simplemente que vayan adecuando sus instalaciones según indica la ley", informan desde el ayuntamiento. Debe haber una sala de culto neutro, sin adcripciones religiosas específicas. De momento se desconoce de qué forma las empresas decidirán retirar de la vista los símbolos religiosos.
Según han explicado estas mismas fuentes municipales a lainformacion.com, estos espacios son públicos y no tienen por qué exhibir símbolos de confesiones religiosas particulares. Sin embargo, cualquier usuario que desee que la cruz o la Virgen estén visibles en el momento de la vela o la cremación de un familiar, no tendrá más que solicitarlo a los trabajadores. También podrán llevar sus símbolos religiosos y colocarlos mientras dure la ceremonia de despedida.
La medida ha levantado cierta polémica en Valencia, una tierra especialmente devota a la advocación de la Virgen de los Desamparados. Durante las fiestas tradicionales de la capital del Turia, las populares Fallas, se realiza una ofrenda de flores pública a la Patrona de la ciudad. Es uno de los actos más importantes de los festejos.El cementerio sigue igual
El Partido Popular ha criticado con dureza la medida llevada a cabo por el ayuntamiento que ahora gobierna por la Coalición Compromís, con el apoyo del Partido Socialista y 'València en Comú', la marca electoral en Valencia del partido Podemos.
"Se trata de un ataque a la libertad religiosa", ha declarado a la web actuall.es la concejal del PP en Valencia, Lourdes Bernal. "Es lamentable, estamos ante una dictadura de un grupo radical como Compromís".
Según Bernal, que fue responsable de la gestión del cementerio en los dos últimos periodos de gobierno de Rita Barberá, antes siempre se habían respetado a todas las confesiones religiosas. Ponían a disposición de la familia del finado un "asesor de duelo" que contactaba con el representante de otra religión para organizar el acto, también en el caso de religiones las diferentes a la cristiana.
En el ayuntamiento explican que no había dicho asesor de duelo como tal: "Simplemente había un sacerdote católico que, en contados casos, ponía en contacto a las familias con ministros de otras religiones. Pero lo hacía por puro altruismo, no porque hubiera un funcionario encargado de hacerlo".Cambio de ubicación del Belén, no supresión
Por otra parte, el Ayuntamiento ha rechazado las que se vayan a tapar todos los símbolos religiosos del cementerio, como apuntaban algunas voces. De hecho, recuerda que hay una ruta turística por varios panteones con estatuas y relieves con ángeles de reconocido valor artístico, y que no hay ningún cambio previsto al respecto. La cruz que preside la entrada del Cementerio general (ver arriba en la foto) seguirá donde está.
Tampoco es verdad, aseguran fuentes municipales, que se vaya a suprimir el Belén que se solía colocar en la Plaza del Ayuntamiento: "Se está estudiando su traslado a otra zona de la ciudad, pero no su eliminación". En el consistorio explican que en ese lugar también se instala por esas fechas una pista de patinaje auspiciada por la asociación de comerciantes, y se entiende que un Belén a tamaño natural puede desentonar en ese lugar. Una posibilidad es llevarlo a la Plaza de la Virgen, a unos trescientos metros de su ubicación actual, donde se encuentra la entrada gótica a la Catedral y a la Basílica de la Mare de Déu.
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