"Basta ya", sentenció el presidente del Barça, Josep María Bartomeu, durante su discurso delante de la Asamblea General anual de los 'socios', los aficionados-accionistas del club.
En opinión del presidente del club, la UEFA "atenta contra uno de los derechos más básicos de la democracia, el de la libertad de expresión".
"Han sancionado al Barça por no impedir que un número determinado de socios expresaran sus sentimientos de una manera pacífica con un símbolo, la estelada, que no fomenta la violencia, que no está prohibido en ningún otro lugar y que representa un sentimiento identitario legítimo de una gran parte de barcelonistas y catalanes", añadió.
En julio, la UEFA sancionó al Barcelona con una multa de 30.000 euros por la presencia de "esteladas" (banderas a franjas rojas y amarillas con una estrella blanca dentro de un triángulo azul) durante la final de la Liga de Campeones, el 6 de junio en Berlín, donde ganó el Barça ante la Juventus (3-1).
Después de la aparición de ese tipo de banderas en un partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones en el Camp Nou contra el Bayer Leverkusen a finales de septiembre (2-1), la instancia europea indicó a la AFP que había inflingido una nueva multa de 40.000 euros al club.
Bartomeu comunicó este domingo que el Barça recurrirá ante las instancias correspondientes, primero ante el Comité de Apelación de la UEFA y luego, si es necesario, ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS). Luego quedarían las opciones del Tribunal Federal suizo y de la Corte Europea de Derechos Humanos (CEDH) en Estrasburgo, a los que también acudiría el club si no tiene éxito en las etapas anteriores.
La UEFA contempla en su reglamento sanciones por "utilización de símbolos, actos o cánticos que no se ajusten al marco de un evento deportivo, en particular mensajes de naturaleza política, ideológica, religiosa, ofensiva o provocadora".
Antes del partido del domingo ante el Eibar en la 9ª jornada de la Liga española se desplegó una pancarta con la mención en catalán "Libertad de expresión".
"El Barcelona quiere reivindicar públicamente el respeto del derecho a la libertad de expresión", anuncia el club por la megafonía del estadio.
Históricamente ligado al nacionalismo catalán, el Barcelona apoyo la celebración en noviembre de 2014 de un referéndum sobre la independencia de Cataluña con respecto a España, que había sido condenado por el Tribunal Constitucional español.
En las recientes elecciones regionales de finales de septiembre, en las que los partidos separatistas obtuvieron una corta victoria en número de escaños, el club optó por permanencer "neutral" durante la campaña.
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