El "cansancio de lo propio" frena al cine latinoamericano, dice David Trueba

Bogotá.- El cineasta y escritor español David Trueba cree que el cine latinoamericano se ve frenado por el "cansancio de lo cercano, de lo propio", que forma parte de una cultura del "autoflagelo" que su país "ha transmitido intravenosamente" a muchas naciones de la región.

A las pequeñas industrias del celuloide de muchos países latinoamericanos "les falta encontrar un respaldo, un orgullo en su población", que generalmente cae "en el elogio de lo que viene de fuera", explicó hoy a Efe durante una entrevista en Bogotá.

Trueba es uno de los invitados en la capital colombiana de la tercera edición del festival VivAmérica, que se celebra en paralelo hasta el próximo domingo en Madrid, Cádiz, Bogotá y Santo Domingo con actividades y conferencias sobre materias diversas como cine, literatura e innovación tecnológica.

"España es un país que por desgracia al artista lo hace sufrir mucho en vida", sostiene el director de películas como "La buena vida" y "Soldados de Salamina", para quien esa "idiosincrasia" se ha trasladado en parte a Latinoamérica.

A su juicio, otro de los obstáculos para el desarrollo del cine latinoamericano es que la gente espera de él que muestre el "exotismo" de cada país, como ocurrió en España durante una época en la que una película "no interesaba" si no había en ella "toreros o alguna escena goyesca".

En el caso de Colombia, si una obra no habla de violencia, narcotráfico o pobreza "no encuentra sitio", reflexiona Trueba, aunque reconoce que poco a poco esa situación está cambiando.

Colombia está haciendo actualmente "buenas películas pequeñas y documentales", pero le falta, como a España, "tener un tejido industrial, tener la capacidad de viajar y un mercado más abierto que el propio", agrega.

Según Trueba, la industria cinematográfica latinoamericana tiene un problema muy parecido a la española y la asiática: el de la "incapacidad de llegar a mercados donde se cocina el dinero del cine, muy dominados por lo anglosajón".

Pese a todo, en su opinión desde los años 60 se está haciendo un cine latinoamericano "muy interesante", radicado en Argentina, Brasil y en algunos momentos en Cuba.

Además, después se han ido incorporando otros países como México, Perú y Colombia, que no tenían fortaleza al principio pero poco a poco fueron "sembrando semilla", comentó Trueba.

Ferviente defensor de la narración como "uno de los enganches de la cadena humana mayores que hay", considera que las grandes riquezas de una nación "no son sus regímenes políticos ni sus grandes militares", ya que finalmente la imagen que uno tiene de un país "viene del camino de la creación artística".

"No tenemos conciencia del sello que dejan los grandes narradores y artistas", subraya Trueba al enfatizar que "la imagen de ficción de un país al final es un hilo muy, muy claro, que estiras de él y acabas encontrando al país real".

Por eso, la conferencia que ha dado en Bogotá dentro del festival VivAmérica trata precisamente de la "necesidad" que hay en la sociedad actual de "la gente que cuenta historias".

Después de llevarse en abril pasado en España el Premio de la Crítica por su novela "Saber perder", su siguiente proyecto, como él mismo desvela, es un guión de una "película extraña" que quiere hacer el próximo año y de la que se resiste a revelar todavía detalles.

"Cuando hablas de cosas que no has hecho es como si pincharas un balón de fútbol y empezara a salirse el aire", concluye.