El congreso rechaza tramitar una reforma para reducir a una semana la campaña electoral


El Congreso de los Diputados rechazó este martes tramitar una proposición de ley de modificación de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General, para reducir el tiempo de las campañas electorales a una semana, como pedía UPN.
La proposición, que sólo tuvo un voto a favor, recibió otros 293 en contra y 18 abstenciones, en una votación en la que, por parte del Gobierno, estuvieron presentes la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría; el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y el de Interior, Jorge Fernández Díaz.
Durante el debate parlamentario, el diputado de UPN, Carlos Salvador, defendió la necesidad de reducir la campaña electoral a una semana, con el fin de reducir gastos y dar ejemplo a la ciudadanía, que se está viendo obligada a hacer “sacrificios” por culpa de la crisis.
Salvador señaló que los medios de información y comunicación con los que cuentan hoy los distintos partidos no son los mismos que los “limitadísimos” que había hace 37 años, en referencia a la cantidad de herramientas digitales y medios de comunicación que existen hoy en día.
Además, defendió que los partidos políticos deben ser “austeros y sensibles a unos ciudadanos que quieren que los partidos adapten su conducta a una realidad que impone sacrificios a todos”.
Por su parte, el diputado del Grupo Popular, José Antonio Bermúdez de Castro, manifestó que el actual periodo de 15 días “es razonable para la conformación de la voluntad popular” y “bastante ajustado”, en comparación con las que existen en otros países.
Rechazó que reducir la campaña suponga una disminución de los gastos, al tiempo que recordó que ese es un “esfuerzo” que “ya se ha hecho” y que los partidos políticos han visto reducidas las subvenciones que percibían, y añadió que esa medida contó el apoyo de todos los grupos parlamentarios, incluido el mixto.
MEJOR, NO PEOR
Por su parte, el diputado socialista José Ignacio Sánchez Amor, aseguró que el PSOE está dispuesto a revisar a fondo la ley, pero “para hacerla mejor, no para hacerla más pequeña”, ni para que la “debilite frente al poder del dinero”. “Una campaña de una semana es una campaña para la televisión, y la gente quiere vernos, quiere tocarnos”, dijo el diputado del Grupo Socialista.
Jordi Xuclà, de CiU, recordó que, por real decreto, los partidos políticos han visto reducida su financiación en un 40% y dijo que, a su juicio, una reducción de la campaña no supondría una modificación sustancial del proceso democrático, como tampoco lo supondría una reducción de concejales.
Añadió que en la anterior legislatura hubo una subcomisión que estuvo trabajando en la reforma de la Ley Electoral. “Y lo acordado por todos también tiene mucho valor”, sentenció.
Por su parte, el portavoz de IU-ICV-CHA: La Izquierda Plural, José Luis Centella, rechazó la propuesta de UPN, por entender que, “en el fondo, lo que viene a decir, es que la democracia es algo que le cuesta demasiado a los ciudadanos”.
En este sentido, defendió que “es cara cuando se convierte en espectáculo” pero que “si trata de incentivar la participación, no tiene por qué ser cara”. Además, dijo que la transparencia “no tiene nada que ver con reducir la campaña electoral”.
COSMÉTICO Y SUPERFICIAL
Por su parte, Toni Cantó, de UPyD, dijo que el cambio propuesto por UPN es “meramente cosmético” y “superficial” y recordó que en la pasada legislatura los parlamentarios sólo fueron capaces “de cambiar el tamaño de las papeletas”.
Aitor Esteban, del PNV, recordó que en su día su grupo parlamentario propuso un acortamiento de la campaña electoral, pues las actuales, “hoy por hoy, resultan un tanto largas”.

Mostrar comentarios