El debate de la región examina la estabilidad del Gobierno asturiano

Oviedo, 8 oct.- El presidente del Principado, Javier Fernández, afronta a partir de hoy su segundo debate sobre el estado de la región que servirá para poner a prueba la estabilidad parlamentaria del Gobierno socialista, que mantiene un pacto de legislatura con UPyD y un acuerdo presupuestario con IU.

El debate llega tras un inicio de curso político marcado por las desavenencias entre los socialistas y sus habituales socios parlamentarios en torno a una reforma de la ley electoral asturiana que formaba parte del acuerdo con el partido magenta, pero condicionando su aprobación a que tuviera una mayoría reforzada.

Tanto IU como UPyD consideran que, pese a que la reforma cuenta a priori sólo con el respaldo de 23 de los 45 diputados, este apoyo es suficiente para una iniciativa que cuenta con una "mayoría reforzada" en la sociedad y de tres de los cinco grupos de la Junta.

Foro y PP mantienen su rechazo -los primeros por exigir un cambio para crear circunscripciones más pequeñas y los segundos por pedir que se mantengan las actuales reduciendo a 35 los escaños en la Cámara- sin atender las peticiones del PSOE a que se sumen al amplio acuerdo que requiere un cambio de las "reglas del juego".

De cara al debate, la formación que lidera Francisco Álvarez-Cascos, principal grupo de oposición en la Cámara, reiterará su criterio de que el Ejecutivo carece de un programa definido respaldado por una mayoría parlamentaria suficiente y criticará la "inactividad" del gabinete que preside Javier Fernández "para que los asturianos se den cuenta de que Asturias está sin gobierno".

El PP, que trasladará al debate su propuesta de poner en marcha un 'plan de choque' para reducir la presión fiscal en la región, coincide además con Foro en que en las sesiones se reflejará la "pasividad" del Ejecutivo en la actual coyuntura de crisis.

El PSOE defenderá, por el contrario, que el Gobierno regional y su grupo parlamentario están cumpliendo "de forma seria y riguroso" su acuerdo de legislatura con UPyD y su pacto presupuestario con IU que, no obstante, ha elevado su tono crítico con el Ejecutivo hasta el punto de advertirle de que "se está jugando la estabilidad".