El Ejército congoleño envía una lancha para evacuar al médico español liberado

  • Kinshasa.- El Ejército congoleño ha enviado una lancha rápida para evacuar al médico español Mario Sarsa de la zona de selva donde ayer fue rescatado, tras haber estado secuestrado por un grupo rebelde de la etnia enyele en un área remota del noroeste de la República Democrática del Congo (RDC).

Kinshasa.- El Ejército congoleño ha enviado una lancha rápida para evacuar al médico español Mario Sarsa de la zona de selva donde ayer fue rescatado, tras haber estado secuestrado por un grupo rebelde de la etnia enyele en un área remota del noroeste de la República Democrática del Congo (RDC).

La lancha tiene que hacer un trayecto de unas dos horas de ida y otras tantas de vuelta desde Mbandaka, la principal ciudad de la provincia Ecuatorial congoleña, hasta el lugar donde estuvo retenido el médico, en una isla del río Congo, unos 150 kilómetros al norte, según dijo a Efe el cónsul de España en la RDC, Enrique Criado.

El cónsul, desplazado a Mbandaka desde Kinshasa para recibir a Sarsa, indicó que tienen preparada en esa ciudad una habitación medicalizada y un doctor, en las instalaciones de la Misión de la ONU en el Congo (MONUC), para hacerle una revisión y, si lo precisa, atenderle.

Además, las Fuerzas Armadas congoleñas también han hecho sus preparativos para recibirle, después de que ayer Sarsa fuera liberado por una unidad del 321 Batallón del Ejército en la isla del río Congo llamada Nganda-Kongo, según han informado las autoridades congoleñas.

Posteriormente, la Embajada de España tiene previsto trasladar a Sarsa a Kinshasa, donde podría viajar a España o quedarse en la RDC, según sus deseos.

Sarsa, según explicó hoy el cónsul español, "parece que fue secuestrado el viernes (2 de abril)", cuando los rebeldes enyele capturaron la "Malaika", la embarcación fluvial en que viajaba desde Kisangani, en el noreste de la RDC, hacia Kinshasa, por el río Congo.

Posteriormente, los insurgentes salieron el 3 de abril hacia Mbandaka en la misma embarcación y atacaron la ciudad y el aeropuerto el 4 de abril por la mañana, de donde fueron desalojados al día siguiente por las Fuerzas Armadas Congoleñas con apoyo de la MONUC.

En aquellos sucesos, según han informado las autoridades congoleñas, hubo al menos 36 muertos, entre ellos tres miembros de la MONUC.

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