El Ejército egipcio califica de "normal" la remodelación de la cúpula militar

El Cairo, 13 ago.- El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de Egipto calificó hoy de "cambio normal" la remodelación de la cúpula castrense ordenada el domingo por el presidente, el islamista Mohamed Mursi, quien además despojó a los militares de una gran parte del poder que se habían reservado.

En un comunicado difundido en su página de la red social Facebook, la Junta Militar aseguró que los cambios de los dirigentes de este órgano son normales porque se trata de "un traspaso de la responsabilidad a una nueva generación de egipcios que protegerá el país".

Mursi anunció el paso al retiro del ministro de Defensa y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Husein Tantaui, y del jefe del Estado Mayor, Sami Anan, así como la anulación de unas enmiendas constitucionales que otorgaban el poder legislativo a los militares.

El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que dirigió Egipto desde el alzamiento que derrocó a Hosni Mubarak en febrero de 2011 a la elección de Mursi en junio pasado, expresó su respeto a estos dirigentes que han traspasado ahora la responsabilidad a la nueva generación.

Asimismo, recordó que nunca intentó perpetuarse en el poder y que logró su misión durante el periodo transitorio con la celebración de elecciones presidenciales transparentes.

"Desde la revolución del 25 de enero (de 2011) y durante el periodo pasado (la transición) el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas ha asumido la responsabilidad de proteger el país a pesar de los desafíos y las amenazas que afrontaba Egipto", apunta la nota.

Por ello, la cúpula castrense pidió a "todos los que tuvieron sospechas de las intenciones de las Fuerzas Armadas" que revisen sus posturas.

Con los cambios efectuados, Mursi concentra en su persona todo el poder ejecutivo y legislativo, pues el Parlamento fue disuelto por orden judicial.

Las fuerzas políticas egipcias dieron este lunes la bienvenida a la remodelación de la cúpula militar, aunque muchos mostraron su recelo ante la concentración de poder que el presidente pasa a disfrutar.