"El ejército inició esta mañana una operación militar con el objetivo de ampliar la banda de seguridad alrededor de sectores controlados por el ejército", afirmó la fuente.
"Ha empezado por Jobar, con operaciones limitadas pero precisas y eficaces contras los centros y las líneas de defensa que utilizan los grupos armados para vigilar el resto de la capital. La aviación siria también está en acción, pero no la aviación rusa", explicó la fuente.
Rusia, aliada del presidente sirio Bashar al Asad, empezó el 30 de septiembre a bombardear por aire a los grupos "terroristas" en Siria, término con el que el régimen de Damasco designa a todos sus detractores.
El barrio de Jobar, en el este de la capital, es un campo de batalla desde hace más de dos años.
Tras haber sido abandonado por la población, los combates entre el ejército y los rebeldes se producen principalmente en túneles o en lo que queda de los edificios, donde están escondidos numerosos francotiradores.
El barrio es estratégico, porque del lado oeste se encuentra junto a la plaza de los Abasidas, que da acceso al centro de Damasco. Por el otro lado, el mismo barrio linda con la Ghuta oriental, una región agrícola al este de Damasco donde la mayoría de las localidades están en manos rebeldes.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), la aviación efectuó al menos ocho ataques en Jobar. En tierra hubo combates entre de un lado el ejército, milicianos prorrégimen y el Hezbolá libanés, y del otro lado el Frente al Nusra, rama siria de Al Qaida, y otros rebeldes islamistas.
Igualmente hubo bombardeos aéreos y de la artillería contra varias localidades rebeldes alrededor de Damasco. Dos niños murieron en Duma, al noreste de la capital, según el OSDH.
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