Declaración como investigado

El exjefe de la UDEF niega presiones a Morocho para quitarle del caso 'Gürtel'

José Luis Olivera asegura ante el juez García Castellón que no ofreció al inspector ningún puesto fuera de España. Tampoco reconoce que recibiera una llamada del exministro del Interior Jorge Fernández Díaz.

Olivera
El exjefe de la UDEF José Luis Olivera
Europa Press

El que fuera jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional José Luis Olivera ha negado este lunes ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que presionara al inspector jefe que investigó la trama Gürtel y la presunta caja 'b' del PP para apartarle del caso. En su declaración como investigado, Olivera ha contradicho todo lo que declaró Manuel Morocho hace dos semanas y ha asegurado que ni le ofreció un traslado fuera de España, ni recibió ninguna llamada del entonces ministro del Interior Jorge Fernández Díaz interesándose por la reacción del inspector sobre el cambio de destino.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 citó a declarar al comisario en el marco de la pieza 7 del caso 'Tándem', que investiga sobre el operativo parapolicial denominado 'Kitchen' montado en 2013 para espiar al extesorero del PP Luis Bárcenas, después de que el inspector Morocho afirmara que en junio de 2013 -un mes antes de que se iniciara dicha operación- Olivera le ofreció un puesto mejor remunerado en Lisboa. Este hecho coincidía con una anotación en una de las agendas de comisario jubilado José Manuel Villarejo en la que se anotó el nombre del policía que investigó Gürtel junto a la capital portuguesa.  

Según fuentes jurídicas presentes en la declaración, Olivera, que sólo ha contestado a las preguntas del magistrado instructor y de su abogado, ha admitido que se reunió en una cafetería con el inspector, pero que fue Morocho quien le indicó que le habían ofrecido dicho puesto. En este sentido, ha apuntado que él no tenía ninguna competencia para proponer un cambio de destino, ya que en 2012 fue designado director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO). Así, sobre la llamada que recibió en ese momento, ha indicado que en ningún caso era del exministro, ya que, según ha dicho, ni siquiera tiene su teléfono. Ha apuntado que la conversación telefónica que mantuvo en ese momento fue con su mujer, quien le llamó para saber por dónde se encontraba y que, debido a que ésta era compañera de trabajo de Morocho, después se fueron juntos a cenar.

Pero en este punto no ha sido en el único en el que Olivera ha desmentido a Morocho. Por un lado, ha asegurado que si en alguna ocasión le preguntó a éste por la Gürtel tras salir de la UDEF, fue por su interés personal, ya que él era la persona que había estado al frente de la unidad cuando estalló el caso. También ha negado cualquier tipo de presión por su parte para que Morocho cambiara las conclusiones de los informes relacionados con los conocidos como 'papeles de Bárcenas' con el objetivo de no afectar a ex altos cargos del partido y personas vinculadas con la formación, como el empresario Ignacio López del Hierro, marido de la exsecretaria general de los 'populares' María Dolores de Cospedal

El exjefe de la UDEF, según las fuentes presentes en la declaración, ha explicado al juez de la Audiencia Nacional que era habitual que la cadena de mando revisara los informes antes de entregarlos al juez y que en muchas ocasiones existían discrepancias. En el caso concreto de Morocho, ha indicado que, en algunas ocasiones, éste incluía indicios contra investigados sin tener pruebas suficientes y que incluso la autoridad judicial llegó a llamar la atención, han señalado las fuentes consultadas. De hecho, Olivera ha llegado a decir que, en su opinión, las acusaciones que hizo Morocho, al que ha definido como "narcisista", en su declaración como testigo contra él y el resto de superiores se debe a que cree que todo el mundo está en su contra. 

Preguntado sobre la 'Operación Kitchen', Olivera se ha desvinculado por completo de la misma, asegurando que no ha tenido ni conocimiento ni participación en ella. Tampoco ha reconocido ningún tipo de relación con Cospedal -quien está citada a declarar como investigada este martes-, ni con López del Hierro -que comparecerá también como imputado este miércoles-, ni con el exsecretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez -cuyo turno será el próximo 12 de julio-. 

No obstante, el juez García Castellón no ha dado del todo credibilidad a este punto, pues, según las fuentes presentes en la declaración, ha advertido a Olivera de que estas afirmaciones contradicen por completo las grabaciones de las conversaciones que el comisario jubilado José Manuel Villarejo mantuvo con él. Debido a que no se le ha podido interrogar por estos audios ni por las anotaciones de las agendas del agente encubierto, ya que ha avisado que no ha podido acceder íntegramente a ellas, el magistrado le ha invitado a revisarlas, tras advertirle que volverá a citarle a declarar para entrar de lleno sobre este punto. 

Mostrar comentarios