Kopacz advirtió en un discurso ante el nuevo parlamento que su partido "no tolerará ninguna mentira" y que recordará al PiS "todas y cada una de sus promesas".
"Espero que lo hagan mejor que nosotros, pero les advierto que no será fácil", añadió la política, dirigiéndose al PiS, que ya ocupó el poder entre 2005 y 2007.
El PO perdió las elecciones del 25 de octubre tras gobernar durante ocho años.
El presidente Andrzej Duda, que fue elegido en mayo y está apoyado por el PiS, manifestó por su parte que Polonia "optó por un cambio".
Kopacz advirtió por su parte a los rivales que "todo poder es temporal", antes de entregar su dimisión a Duda.
Permanecerá en el cargo hasta que sea reemplazada por su sucesora, Beata Szydlo, este viernes o el próximo lunes.
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