El gobierno postpone la ley de seguridad ciudadana

El Gobierno ha decidido postponer el borrador del anteproyecto de la Ley de Seguridad Ciudadana, que tenía previsto analizar mañana en el Consejo de Ministros y que la levantado una fuerte polémica política y social por las fuertes sanciones que pretende establecer para determinadas infracciones como insultar a un policía o manifestarse ante el Congreso de los Diputados.
Fuentes gubernamentales informaron a Servimedia que el Ministerio del Interior ha decidido retrasar la presentación de los aspectos principales de la Ley de Seguridad Ciudadana con el fin de perfilar algunos aspectos técnicos y mejorar detalles jurídicos de la nueva norma.
Aunque el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, tenía previsto presentar este viernes en el Consejo de Ministros un informe sobre el anteproyecto de la Ley de Seguridad Ciudadana que está preparando su departamento, finalmente no será así.
El nuevo texto legal que prepara el Gobierno contempla como infracciones graves, castigadas con entre 1.001 y 30.000 euros, las "amenazas, vejaciones, coacciones o injurias" a agentes de la autoridad.
Esta especial protección garantizaría el trabajo de las fuerzas policiales en determinadas actuaciones, como manifestaciones, donde en los últimos años los agentes han sido objeto de ataques denunciados por los sindicatos que representan a estos funcionarios.
Al mismo tiempo, considera infracción muy grave, castigada entre 30.001 y 600.000 euros, difundir imágenes de policías con objeto de desacreditarlos o poner en riesgo su seguridad. En lo que se refiere a las manifestaciones y las protestas, el texto elaborado por Interior considera infracción grave ir encapuchado u ocultando el rostro en situaciones en las que se está alterando el orden público y donde el ir emboscado ayuda a ese fin.
Asimismo, fija como infracción muy grave llevar a cabo protestas no comunicadas o prohibidas frente al Congreso de los Diputados o el Senado, sin necesidad de que estas cámaras estén reunidas. Otras novedades son que se considerará infracción muy grave reunirse o encaramarse a infraestructuras críticas, lo que incluye aeropuertos y centrales nucleares. También será una infracción muy grave usar señales luminosas para despistar a los conductores de trenes o aviones.