La comisión bilateral del Gobierno con la Generalitat ha decido, en su primer encuentro en tres años, lanzar la inversión de 1.700 millones de euros prevista para la reforma de EL Prat y ceder todos los servicios de viajeros de ferrocarril y cercanías (Rodalies) a la Comunidad catalana. En la cita se marcó el calendario para los próximos meses y se estableció la aportación de fondos del Estado para becas, educación y formación profesional a definir en el próximo mes de octubre, según explicó la ministra de política territorial, Isabel Rodríguez tras el encuentro.
Los temas económicos y la agenda para realizar al menos un encuentro técnico al mes, hasta la próxima cumbre bilateral de febrero del año que viene, marcaron la cita de este viernes en Madrid, de la que se destaca el desbloqueo de la inversión en El Prat, prevista desde hace más de un año, así como la cesión de fondos y competencias para el servicio de catalán de Cercanías. La ministra destacó el trabajo de los representantes del Ministerio de Trasportes en esta materia, dirigidos ahora por la exalcaldesa de Gavá, Raquel Sánchez (PSC), gran conocedora de la zona y de los servicios públicos catalanes pendientes de inversión, si bien explicó que el proyecto del aeropuerto se plantea de forma conjunta con una inversión similar en Barajas, de forma que ambas instalaciones puedan formar un 'hub' de movilidad internacional.
Con ese escenario, de lo que no se habló fue del punto más conflictivos hasta ese momento en ese proyecto: quien va a llevar la gestión del aeropuerto catalán en los próximos años (una vez hecha la inversión millonaria prevista). Además de la inversión en El Prat, el objetivo es conectar ese enclave y los otros aeropuertos catalanes internacionales (Reus y Girona) con el tren de alta velocidad, de forma que se pueda establecer una verdadera movilidad coordinada y de calidad en la comunidad.
El otro tema espinoso del encuentro entre el Ejecutivo y la delegación catalana, por más técnica que se planteara la cuestión, fue la negativa a tratar sobre el reparto de los fondos comunitarios de forma bilateral. Aunque la delegación catalana puso el tema sobre la mesa, la ministra de Política Territorial, reiterando lo que había dicho por la mañana su homóloga de Hacienda y el viernes el presidente Sánchez, explicó que ese no era el contexto en el que se debía hablar de fondos UE. Esa es la razón por la que, en la reunión sectorial de Hacienda de este lunes, antes de la bilateral, estuvo presente una delegación catalana, tras el plantón Pere Aragonès de la semana pasada a la conferencia de presidentes.
Victimismo oficial
Desde la parte catalana, el vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró, y la consejera de presidencia, Laura Vilagrá, admitieron el avance que supone para la economía catalana el desbloqueo de la inversión en El Prat y su configuración como 'hub' internacional, si bien explicaron que seguirán adelante para conseguir el traspaso de las 56 competencias pendientes y que llevaron a la reunión. En el cao de los Rodalies, Puigneró se mostró escéptico sobre la delimitación de la cesión de la gestión que se debe hacer en el encuentro de octubre. Tras comentar el malestar catalán por no hablar del reparto de fondos europeos también de forma bilateral, conminó a Sánchez a "demostrar que de verdad quiere avanzar en el autogobierno de Cataluña", entendido como un avance hacia lo que de verdad quieren desde ERC, que es la autodeterminación.
Una de las cuestiones en las que hicieron incidencia ambas partes es un pacto para evitar o reducir la conflictividad institucional entre el Gobierno y la Generalitat, sobre todo en todas las normas catalanas que están judicializadas o recurridas ante el Tribunal Constitucional. En cuestiones como el control de los precios de los alquileres y otras normas de carácter más social, el compromiso es celebrar reuniones técnicas para llegar a un acuerdo antes de que finalice el año y "evitar la suspensión de normas de carácter general", en palabras de Vilagrá. El optimismo con el que la nueva ministra de Política Territorial y Portavoz del Gobierno presentaba el acuerdo sobre El Prat y los próximos compromisos de trabajo contrastaba tras el encuentro de este lunes con las alusiones por parte de la delegación catalana de la "continuidad de la represión" mientras no se les traspase todo lo que piden.
Las siguientes reuniones técnicas entre ambas partes tendrá lugar a partir del próximo mes de septiembre y se centrarán en la comisión mixta de asuntos económicos y fiscales, la comisión de infraestructuras, para la transferencia efectiva de la gestión de los Rodalies, más los grupos de trabajo de final de año para definir la cesión de las becas y ayudas al estudio a Cataluña, así como preparar el traspaso de la formación profesional. Con todo lo que se avance en esas reuniones técnicas se celebrará una nueva cumbre bilateral entre enero y febrero próximos.
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