El gobierno responde al pnv que las banderas incautadas en la guerra civil son patrimonio de todos los españoles

El Gobierno respondió este miércoles al PNV que las banderas y las enseñas incautadas en la Guerra Civil son patrimonio de todos los españoles y reciben el mismo tratamiento jurídico que los demás bienes históricos que integran los fondos museísticos.
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, respondió así en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados a una pregunta del peneuvista Joseba Agirretxea sobre la devolución pendiente de banderas y enseñas incautadas a quienes defendían la legalidad vigente por parte del ejército sublevado, que después “se instaló” como ejército del Estado. Todo ello, denunció, fue incorporado “como botín de guerra” al patrimonio español, lo cual es una “ofensa” para sus legítimos propietarios.
El PNV había protestado porque esa pregunta iba dirigida a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, ya que el asunto afecta a varios ministerios, y por ello Agirretxea pidió a Catalá una respuesta política sobre la voluntad del conjunto del Ejecutivo.
Catalá explicó que no hay “ninguna razón política” que impida la devolución de esas piezas, y que la razón es “de carácter jurídico, de respeto” a las normas, porque no son “simples objetos”, sino bienes históricos que integran los fondos museísticos del Estado. Tienen el mismo tratamiento, merecen el mismo valor y consideración que otras muchas piezas originarias de ese conflicto o de cualquier otro de los que se han producido en la historia de España y por ello están “a disposición de todos los españoles”.
El preámbulo de la ley que regula el patrimonio histórico, añadió, establece que en un Estado democrático los bienes culturales deben estar “adecuadamente protegidos, puestos a disposición de todos los ciudadanos”, y eso es lo que se hace en España.
Agirretxea reclamó al ministro un comportamiento “mínimamente democrático”, y aseguró que no hay necesidad de ley alguna “para devolver lo incautado”. Preguntó, de forma concreta, por qué una ikurriña está en el archivo de Salamanca sin haber sido cedida sino “arrebatada” de una sede. “Es nuestra y no tienen ningún derecho a retenerla”, exclamó. “No es propiedad de todos los españoles”, sino del PNV, insistió.
Catalá subrayó que en 2008 el Gobierno aprobó un real decreto que preveía la restitución de esos bienes, y preguntó al PNV por qué no solicitó la devolución de esa bandera. Las protestas en los bancos de ese partido llevaron al presidente del Congreso, Jesús Posada, a llamar al orden al portavoz, Aitor Esteban.
“Comprendo su interés, legítimo y razonable”, dijo Catalá, pero esos bienes no reciben un tratamiento distinto al del resto de los que componen la “memoria colectiva de todos los españoles”, y ha habido posibilidad de devolución, como se procedió con los papeles del lehendakari Agirre.