El Gobierno Vasco no maneja la hipótesis de una coalición pero no la descarta

Vitoria, 30 abr.- El Gobierno Vasco del PNV "no excluye absolutamente" ninguna fórmula para lograr un acuerdo de estabilidad ante su minoría parlamentaria, aunque en este momento "no maneja la hipótesis" de formar un Ejecutivo de coalición con el PSE y el PP.

El portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka, ha profundizado en la habitual rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno en el ofrecimiento que el lehendakari, Iñigo Urkullu, hizo ayer a socialistas y populares de alcanzar un pacto de estabilidad.

Erkoreka ha explicado que Urkullu no incluyó a EH Bildu en ese ofrecimiento porque la coalición soberanista se ha "autoexcluido" por las "negativas rotundas" que ha dado al Gobierno Vasco en distintos asuntos.

En concreto, el portavoz se ha referido a la "negativa" de EH Bildu a apoyar al PNV en la ronda de conversaciones que los nacionalistas celebraron en octubre pasado tras ganar las elecciones, también a su negativa en la negociación presupuestaria y, por último, a su rechazo al "documento de bases" que el lehendakari presentó a los grupos en el marco de esa misma negociación.

A ello se suma, ha dicho Erkoreka, el apoyo de la coalición a la huelga general convocada por los sindicatos ELA y LAB en Euskadi para el próximo 30 de mayo, ya que se trata de una convocatoria "política" que persigue un cambio de Gobierno.

Aunque EH Bildu sí debe estar presente en el "pacto de país" que también ayer propuso el lehendakari, Erkoreka ha explicado que la oferta para el "pacto de estabilidad" se ha limitado a los partidos que han mostrado "una actitud favorable o no radicalmente contraria" a construir un escenario de estabilidad institucional, económica y presupuestaria.

A estas fuerzas el Gobierno Vasco "les tiende la mano" porque "las combinaciones son muy diversas" y el pacto puede concretarse "en fórmulas muy diferentes que no tienen que pasar necesariamente por un acuerdo bilateral con una sola formación".

El portavoz del Ejecutivo ha abogado por trasladar a este ámbito el consenso alcanzado en la anterior legislatura en la ponencia de paz del Parlamento Vasco, que logró fijar un "suelo ético compartido".