Salvo en casos excepcionales

Educación acuerda con las CCAA el fin del curso en junio y un aprobado general

Aula de un colegio.
Aula de un colegio.
Oscar Cañas - Europa Press - Archivo

Acuerdo entre el Ministerio de Educación y las comunidades autonómas para conceder el aprobado general salvo en casos muy excepcionales este curso, que finalizará en junio con la posibilidad de que se impartan durante el periodo estival clases extraordinarias en centros de refuerzo. Todos alumnos de infantil, primaria, secundaria y primero de bachillerato pasarán al siguiente curso, aunque no con la misma nota: los profesores decidirán la calificación de los estudiante en base a sus notas en los dos primeros trimestres, cuando las clases fueron presenciales antes de que el Gobierno decretara el estado de alarma.

La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha pactado esta medida con los consejeros autonómicos durante la reunión telemática de la Conferencia Sectorial de Educación celebrada este miércoles, donde también se ha discutido cómo cerrar el curso y examinar a los más de ocho millones de estudiantes no universitarios confinados en sus hogares desde hace un mes.

Según ha informado el Ministerio, Celaá y los consejeros de educación han decidido no prolongar el curso más allá de junio, como estaba previsto, aunque se permitirá que los gobiernos autonómicos podrán organizar o apoyar la realización de actividades de refuerzo en el periodo estival "en formas diversas y combinadas con actividades lúdicas". Estas actividades pueden estar promovidas incluso por ONG o asociaciones "contando con el concurso del voluntariado y en contacto con los centros educativos y sus docentes". 

La propuesta de abrir los colegios en verano para ofrecer clases de apoyo es una petición de organizaciones como Save The Children y la Confederación Española de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos CEAPA para que los estudiantes "en situación desfavorecida o con desfase educativo" puedan recuperar materia, pero también para ayudar a la conciliación de las familias "en momentos económicos que se prevén muy duros" cuando finalice el estado de alarma.

La mayoría de los sindicatos docentes se habían opuesto en las últimas semanas a la posibilidad de que el curso se prolongase durante verano para dar descanso tanto a profesores como estudiantes y familias. Los sindicatos defienden que la suspensión de las clases presenciales no ha supuesto la interrupción del curso, y los docentes han seguido teletrabajando desde que cerraron los centros escolares.

Mostrar comentarios