Atenas, 31 oct.- El jefe de los servicios secretos de Grecia (EYP), Theodoros Dravillas, negó hoy ante una comisión parlamentaria que su organismo esté espiando a diputados, tal y como habían asegurado algunos partidos.
La comparecencia de Dravillas -que tuvo lugar en una sesión a puerta cerrada- se produjo a raíz de las denuncias de que los teléfonos de diputados de la principal formación de oposición, la izquierdista Syriza, habían sido pinchados.
Según informó la cadena de televisión Skaï citando a fuentes anónimas, el jefe de los servicios secretos griegos dijo que su organismo no graba las conversaciones sino que sólo dispone de equipos capaces de determinar entre qué números de teléfono se hicieron las llamadas.
Sin embargo, esto contrasta con las recientes declaraciones del exministro de Exteriores Theodoros Pángalos, quien aseguró que mientras encabezaba la diplomacia helena se espió a los embajadores de EEUU en Atenas y Ankara (Turquía) y que él mismo leía las transcripciones de las escuchas cada mañana.
El portavoz de Amanecer Dorado, Ilyas Kasidiaris, también preguntó a Dravillas sobre el tema, ya que en las últimas semanas se han filtrado a la prensa numerosas informaciones sobre presuntas escuchas a los diputados del partido neonazi.
Kasidiaris acusó al Gobierno de querer acabar con la democracia a través de las escuchas ilegales y anunció que los tres diputados encarcelados -entre ellos el líder del partido, Nikolaos Mijaloliakos- presentarán un recurso judicial contra el responsable del espionaje telefónico dentro de los servicios secretos.
El portavoz de Amanecer Dorado aseguró que cuando la cúpula del partido fue detenida a finales de septiembre, un juez les anunció que sus teléfonos estaban pinchados por "razones de seguridad nacional".
Un diputado de la formación gubernamental, la conservadora Nueva Democracia, también ha pedido al Parlamento que investigue cuándo comenzaron las escuchas de EYP a Amanecer Dorado y si fueron autorizadas por la Fiscalía.
En declaraciones a Skaï, el portavoz del Gobierno, el conservador Simos Kedikoglu, justificó el espionaje a Amanecer Dorado ya que, según dijo, Grecia "se enfrentaba a un intento de derrocar el sistema de gobierno existente".
"La investigación estaba en curso y el asesinato de Fyssas (el rapero izquierdista muerto a manos de un militante neonazi) actuó de catalizador para acelerar el proceso", explicó Kedikoglu.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios