El juzgado reclama documentación que tenía Cuenca sobre holandeses asesinados

Murcia, 30 oct.- El juzgado de Molina de Segura (Murcia) que investiga el asesinato de la jugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y de su pareja, Severein Lodewijk, ha ordenado que se incorpore a la causa una documentación relativa a ambos que fue intervenida en la casa de Juan Cuenca, uno de los imputados en los hechos.

La resolución judicial, a la que ha tenido acceso Efe, estima así la petición de la defensa personada en las actuaciones en representación de las familias de los fallecidos.

Se trata de una carpeta que contenía las reservas de vuelos y hoteles para Visser y Lodewijk y que fue hallada en poder de Cuenca en su vivienda de Valencia cuando la policía la registró el pasado 25 de mayo.

El acta de entrada y registro recogía que entre el material aprehendido se encontraba una carpeta blanca con varios folios, reservas de vuelo y otros documentos a nombre de Cuenca y Lodewijk.

El juzgado ha declarado igualmente pertinentes otras propuestas de prueba solicitadas también por esta acusación particular, aunque advierte que habían sido ya acordadas a instancia del fiscal.

Estas pruebas son la declaración de la propietaria de la vivienda rural de Molina de Segura donde se cometió el doble crimen el 13 de mayo pasado y las de varios empleados del hotel donde se alojó la pareja a su llegada a Murcia.

También se ha declarado procedente la práctica de un informe sobre la imputabilidad de otro imputado, Serafín de Alba, dueño del huerto de la pedanía murciana de Alquerías donde fueron enterrados los cadáveres de Visser y su pareja, encontrados dos semanas después de su muerte.

Al igual que el fiscal, la acusación particular pidió también que se requiera al Instituto de Medicina Legal de Valencia para que remita el informe forense elaborado sobre las quemaduras que presentaba Cuenca en el momento de su detención, lo que el juzgado ha acordado también.

A lo que no se accede es a atender otra solicitud de esta defensa, que había pedido que se llamara a declarar a un testigo que declaró en su momento ante la Policía Nacional para que ampliara el testimonio que vertió entonces sobre una conversación mantenida con Cuenca en la que se menciona esas quemaduras.