El PE avisa de que no apoyará una "mala solución" para las quiebras de bancos

  • El Parlamento Europeo (PE) mostró hoy su rechazo al sistema europeo para la resolución de bancos diseñado por los países y advirtió de que no apoyará una "mala solución", en palabras del diputado español Antolín Sánchez Presedo (PSOE).

Estrasburgo (Francia), 4 feb.- El Parlamento Europeo (PE) mostró hoy su rechazo al sistema europeo para la resolución de bancos diseñado por los países y advirtió de que no apoyará una "mala solución", en palabras del diputado español Antolín Sánchez Presedo (PSOE).

Los diputados se mostraron dispuestos a encontrar una compromiso sobre esta cuestión antes de las elecciones europeas del próximo mes de mayo, pero recalcaron que no aceptarán la propuesta puesta encima de la mesa por los Veintiocho sin cambios.

"El Parlamento Europeo no apoyará una mala solución", afirmó durante un debate en la sesión plenaria Sánchez Presedo, uno de los ponentes del informe que el jueves será votado en el pleno de la Eurocámara sobre el mecanismo único de resolución bancaria.

El diputado socialista recalcó que existe una "ventana de oportunidad pero indicó que es necesaria "voluntad" para lograr este consenso, y avisó a los países de que las negociaciones son "un baile, y para un tango, siempre se necesita que bailen dos".

Los Estados miembros cerraron en diciembre un acuerdo sobre el mecanismo de resolución bancaria que ahora negocian con la Eurocámara, que se opone a un sistema que otorga el protagonismo a los propios países y relega a las instituciones comunitarias a un segundo plano.

"Una quiebra podría no resolverse en un fin de semana", advirtió la diputada holandesa del Partido Popular Europeo (PPE), Corien Wortmann-Kool.

"El sistema de decisión es demasiado complejo y no va a ayudar a resolver los problemas de los bancos en un tiempo rápido", aseguró por su parte el diputado alemán del grupo de Izquierda Unitaria, Jürgen Klute.

Los eurodiputados también rechazaron que el fondo al que se recurrirá para liquidar bancos esté dividido en compartimentos nacionales que se irán fundiendo poco a poco durante diez años, de modo que no se convertirá en una verdadera caja única europea hasta 2026.

Países como Irlanda, eurodiputados y la Comisión Europea se han mostrado a favor de reducir este periodo.

"Lo más rápido que mutualicemos los compartimentos nacionales, mejor. Personalmente estoy a favor de la puesta en común dentro de 5 años en lugar de 10", dijo el comisario de Mercado Interior, Michael Barnier, quien también propuso acortar la mutualización del fondo a siete años, pero acelerando la puesta en común de los fondos en los primeros ejercicios.

El comisario europeo y varios eurodiputados también pidieron que se establezcan "cortafuegos" para hacer frente a las dificultades financieras que surjan durante el periodo transitorio hasta que el fondo esté plenamente capacitado, una cuestión que estaba prevista pero que los Veintiocho dejaron sin resolver en diciembre.

"Con la propuesta actual no habrá cortafuegos en los primeros años, justo cuando podrían ser más necesarios", recalcó la diputada polaca del PPE Danuta Maria Hübner.

Barnier subrayó la necesidad de abordar la creación de estos de inmediato, aunque se pongan en marcha de manera paulatina, y apuntó a la propuesta de la eurodiputada socialista portuguesa Elisa Ferreira de establecer una línea de crédito de último recurso, de modo que el cortafuegos "será en forma de garantías y préstamos reembolsados por dinero privado", lo que limitaría el riesgo, dijo.

Los eurodiputados también criticaron que el fondo se cree en base a un acuerdo intergubernamental, lo que en la práctica supone que quedaría fuera del derecho comunitario y, por tanto, lejos del control y la participación de Bruselas.

Barnier respaldó las aspiraciones de los eurodiputados de reforzar la "democratización" del mecanismo de resolución y señaló que éste debe ser una "autoridad independiente, pero que rinda cuenta de sus actos ante el Parlamento" Europeo.

Durante su intervención, Evangelos Venizelos, ministro de Economía de Grecia -país que este semestre ostenta la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea- se mostró convencido de que se puede lograr un acuerdo "en los procedimientos y las cuestiones sustanciales" antes del final de la legislatura.

"Pese a que se han mostrado puntos de fuerte crítica, salgo de este encuentro con un ligero optimismo", señaló Venizelos, quien consideró que las partes se hallan "muy cerca de encontrar un compromiso práctico". EFECOM

mtm-lmi/jla

(Para más información del Parlamento Europeo www.euroefe.com)

Mostrar comentarios